Ayer, 18 de julio, se recordó, en la memoria de muchos (aún vivos), el inicio de nuestra Guerra Civil de 1936-1939, ya han pasado 71 años pero alguna secuela nos ha dejado, a pesar de la "Transición democrática". En este país las diferencias de clase todavía siguen vigentes, por muy democrática y social se denomine su Constitución actual. Podremos hablar de izquierdas y derechas o de "las dos Españas", pero el concepto de Democracia no está ligado en estos momentos con el de Igualdad y Libertad sociales, y así seguiremos manteniendo las desigualdades que conllevaron a la guerra de los años treinta en España.
En aquellos años quienes hicieron frente a los militares golpistas y a los fascistas fueron gente de la calle, trabajadores con ciertas inquietudes y un arraigado compromiso social e histórico que militaban o simpatizaban con las organizaciones obreras y los partidos políticos de izquierdas; mientras la ineptitud de los gobernantes republicanos dejaban continuar el avance del levantamiento militar por la Península.
Los trabajadores de la zona leal a la República no dieron su sudor y sangre por mantener los privilegios de la burguesía liberal-republicana, sino optaron por hacer la Revolución social. No fue la antítesis democracia-fascismo, fue Revolución social contra el fascismo y semejantes contrarrevolucionarios.
Duró tres años la "maldita guerra" (como decía mi abuela) y la reacción triunfó en la persona del general Franco, que sumó al país en una ferrea y oscura dictadura, cuyas secuelas aún permanecen en esta nuestra monarquía parlamentaria. Se perdió por muchos factores la guerra, pero el principal fue: el Gran Capital internacional, que no permitió que la Revolución triunfase (con apoyo de los estalinistas). Después llegó Franco con los suyos.
Por eso os pongo, como homenaje, este video...
Al respecto recuerdo unas palabras de Buenaventura Durruti:
El pueblo español quiere la Revolución y la está haciendo, a ello se oponen los fascistas. Estamos dispuestos a acabar con el fascismo, incluso, a pesar del gobierno republicano. No hay gobierno en el mundo que luche realmente contra el fascismo, para destruirlo. Nosotros luchamos por la Revolución, y en esta lucha sólo podemos contar con nosotros mismos. No hay gobierno que quiera ayudar a una revolución proletaria, temen el contagio. Hay que hacer la guerra y la revolución al mismo tiempo.
Krates,
ResponderEliminarVaya video, llega muy, muy dentro.
Esta es una de esas entradas en las que quiero poner un comentario, pero quizás hay tantas cosas que siento sobre este tema que es difícil.
¿Cómo explicar el dolor al pensar en tantas ilusiones para sacar adelante una sociedad nueva truncadas por un grupo de golpistas asesinos?
¿Cómo saber transmitir a los niños y jóvenes de hoy en día que no hay que vivir con rencor, pero tampoco hay que olvidar la historia y que quienes derrocan con las armas un régimen legítimo son golpistas y no héroes de la patria?
Siento un profundo agradecimiento por aquellas personas que fueron capaces de venir a luchar para defender la República.
¿Hoy somos tan generosos con otros países y dejamos todo para ir a defender los ideales que creemos más justos o sólo hablamos desde nuestras cómodas casas?
No hay nada peor que las guerras, pero hay momentos en que defender lo que sientes es la única opción.
Como no soy capaz de expresar todo lo que quisiera decir, copio un poema que he visto por la red, un poema que alguien escribió en aquéllos duros tiempos como homenaje a los brigadistas internacionales.
Decid que no sabían español
Al principio,
Y nada de las artes de la guerra
-cómo apuntar, cómo atacar y retirarse,
cómo matar, cómo enfrentarse con la muerte,
no lo sabían, al principio.
Y ahora decid
Que mientras los famosos, los grandes, los viejos, los ricos
Y los ambiciosos se afanaban
Vendiendo, discutiendo,
Traicionando, encubriendo, transigiendo,
Sobornando, chantajeando, lloriqueando,
Oprimiendo, estrangulando,
ellos comprendieron y obraron, supieron y murieron.
Eso es verdad en esos años muchos franceses, estadounidenses polacos, yugoslavos, etc. abandonaron sus hogares par venir a luchar a España contra el fascismo. Otros, como los italianos y alemanes antifascistas, lo hicieron porque ya lo conocían. Y muchos dejaron su vida aquí, en tierra española, siendo extranjeros.
ResponderEliminarLa mayoría de estos voluntarios estaban encuadradados en las Brigadas Internacionales (balón de oxígeno para la República), no eran todos comunistas, pero la Internacional Comunista las dirigía desde Moscú, eso es un hecho. Con esto y el envío de armamento soviético (una especie de caballo de Troya), los estalinistas crecieron y organizaron la Contrarrevolución en el bando repúblicano. Más tarde llegó el triunfo de la reacción franquista.
Continuo, se me ha ido el ordenador:
ResponderEliminarUno de estos extranjeros que vinieron a luchar y morir en España fue el anarquista italiano Camilo Berneri. A pesar de la presencia libertaria en el gobierno central y el catalán, más el formado por el Consejo de Aragón, que tuvo un gran apoyo por la militancia anarquista, en especial sus comités superiores, éste mantuvo su discrepancias ante este hecho. Y otros como la circunstancial regla adoptada también por muchos libertarios: "Lo Primero es ganar la guerra". Camilo dijo:
"El dilema guerra o revolución ya no tiene ningún sentido. El ünico dilema es éste: o victoria contra Franco mediante la guerra revolucionaria o derrota."
Tras los Sucesos de mayo de 1937, aparecieron los cadáveres de este militante italiano junto al de otro camarada italiano, Barbieri, asesinados, no por los fascistas, sino por los chekistas de Stalin y sus acólitos españoles del PCE y el PSUC.
Lo peor de la Guerra Civil española fue que los combatientes de un bando, no estaban seguros del todo, de quíen era su enemigo y por donde vendrían los ataques.