http://franciscopulido.blogspot.es/i2011-01/, 05/01/2011
Cada año, el Estado financia con más de 6.000 millones de euros las actividades educativas, sociales, sanitarias y de culto de la Iglesia católica. De ese dinero, más de 3500 millones se ceden a centros escolares y más de 600 millones se destinan a pagar a los profesores de religión u otros docentes de centros concertados.
En 2005, la Iglesia católica consiguió una sensible mejora en su financiación desde las Administraciones Públicas al lograr el aumento del tramo que cada contribuyente puede destinar a la Iglesia, así este tramo pasó del 0,52% del IRPF (Impuesto de la Renta de las Personas Físicas) al 0,7%. En 2009 más de 7 millones de contribuyentes españoles marcaron la casilla de la Iglesia, esto supuso un reporte para la Iglesia de 241 millones de euros.
En la presentación de la Memoria justificativa de actividades, el vicesecretario para Asuntos Económicos de la Conferencia Episcopal, Fernando Giménez Barriocanal declaró: “no podemos avanzar una cifra exacta de lo que la Iglesia le ahorra al Estado, pero no es un disparate hablar de 30.000 millones de euros, incluso nos quedamos cortos”.
Con los más de 6000 millones de euros públicos destinados a la Iglesia se financia tan solo el 30% de su actividad. Según la asociación España Laica, las cuentas de la Iglesia son de las más opacas de Europa y se calcula que el dinero destinado a financiar las actividades de la Iglesia puede superar los 20.000 millones de euros en total.
Otras actividades que ayudan a financiarse a la Iglesia católica es el paso del cepillo en cada misa. Los 23.000 templos españoles reciben anualmente unas donaciones conjuntas de más de 600 millones al pasar el cepillo, según España Laica. La Iglesia posee cerca del 80% de todo el patrimonio histórico-artístico español, más de 100000 propiedades inmobiliarias y cerca de 100.000 hectáreas de terreno. La Iglesia recibe casi 70 millones de euros por las rentas de su patrimonio, según datos de España Laica.
En España, la Iglesia católica controla también más de 2.000 centros sanitarios, sociales y de caridad; casi 2.000 colegios, 6 universidades, 73 seminarios, una emisora de radio, una mutua de seguros, 30 editoriales, 57 revistas y tres portales de internet, entre otras muchas actividades culturales, sociales y económicas. Con la gestión de estos negocios y centros la Iglesia consigue más de la mitad de su financiación.
Desde diversas organizaciones laicas se denuncia que muchas de las actividades económicas de la Iglesia están libres de impuestos. Las exenciones tributarias de la Iglesia han supuesto una falta de recaudación de 900 millones de euros, según España Laica.
La desgravación de los donativos es otra práctica común entre los fieles católicos para financiar su culto y supera en un 70% lo percibido por el IRPF. Esto se debe a que las donaciones a la Iglesia desgravan un 25% del IRPF y un 35% del Impuesto de sociedades.
Desde múltiples asociaciones laicas se denuncia que no se haya ahondado en un verdadero modelo de autofinanciación de la Iglesia. El Concordato que rige las relaciones entre España y el Vaticano sigue intocable a pesar de que lleva más de 30 años sin revisarse. El diputado de IU (Izquierda Unida) Gaspar Llamazares ha puesto el grito en el cielo por la demora en la aprobación de la ley de libertad religiosa y porque, entre otras muchas cosas, el Estado pagará la mitad de la Jornada Mundial de la Juventud que se celebrará el próximo verano en Madrid.
Ni un euro mio más para la cooptadora, usurera, desauciadora, inmatriculadora, mentirosa e inmoral Conferencia Episcopal presidida por el cainita ROUCO VARELA.
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