miércoles, 26 de diciembre de 2012

España exporta lujo, mientras sufre miseria


Las ventas en el sector de alta gama se elevaron un 15% en 2012

25 dic. 2012

Mientras la mayoría de los españoles sufre las consecuencias de la crisis que afecta gravemente al país, el sector del lujo en España experimentó durante este 2012 un importante aumento y facturó unos 4.790 millones de euros.

Esto se traduce en un importante repunte que contrasta notablemente con el descenso generalizado del consumo causado por la crisis, marcada por una preocupante tasa de paro y que ha llevado a la administración de Mariano Rajoy a aplicar recortes en diferentes áreas sociales clave, así como a subir el IVA, el impuesto que afecta a todos los bienes de consumo.

Sin embargo, en el mundo de la alta gama, la situación es completamente distinta. Ya en 2011, el sector del lujo Made in Spain ('Fabricado en España') vendió un 20% más respecto al año anterior gracias a su internacionalización y esta tendencia se ha reforzado durante este año, indicó la presidenta ejecutiva de la asociación Luxury Spain, Cristina Martín.

«España es exportadora de lujo. El 40% de la facturación de las empresas españolas se debe a la venta internacional», dijo Martín. Asimismo, explicó que al consumidor extranjero cada vez viaja más a España en busca de los productos españoles que destacan por su «calidad y tradición», pero más de la mitad de los turistas que visita el país todavía se decanta por firmas internacionales.

El sector de lujo, generador de empleo en un país que se 'hunde'

El lujo es un sector que «se mantiene y genera empleo», lo que ayuda a paliar la actual situación económica, subrayó Martín. En su opinión, el Gobierno debería apoyar la promoción de este sector en el exterior, ya que si las empresas nacionales elevan sus ventas y generan más beneficios podrán crear más puestos de trabajo en España, el país con mayor número de desempleados de la Unión Europea, y ayudar a reactivar el consumo.

La empresaria recalcó que a diferencia de España, en otros países como Francia e Italia, en los que gran parte de la economía se basa en el lujo, sus respectivos Gobiernos han ayudado a las empresas a hacer «marca por el mundo».

Aunque España es actualmente el quinto país del mercado del lujo dentro de la Unión Europea, por detrás de Francia, Italia, Reino Unido y Alemania, según Martín, los productos nacionales tienen «mucho potencial» y con el apoyo del Gobierno la nación podría convertirse en referente mundial de la gama alta.

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