jueves, 28 de febrero de 2013

Mali, agenda oculta

El Gobierno francés afirma que, en Mali, solo le mueve la paz y desterrar una amenaza islamista con capacidad para desestabilizar toda la región. La antigua potencia colonial, sin embargo, parece estar interesada en algo más. Uranio, petróleo, gas, oro..., los recursos enterrados bajo el suelo de Mali simbolizan la batalla de las potencias mundiales en África

FERNANDO GOITIA

Soldados franceses desplegados por Bamako.
 François Hollande lo repite como un mantra: «No defendemos ningún tipo de interés político o económico en Mali; defendemos, simplemente, la paz».

Desde el pasado 11 de enero, cuando llegaron las primeras tropas francesas, el presidente galo insiste en esta idea para justificar la intervención en la antigua colonia africana. El objetivo, aseguran tanto él como su ministro de Defensa, es recuperar el control del norte del país en manos de yihadistas desde 2012 y estabilizar la región. La bondad de sus intenciones, sin embargo, es puesta en entredicho por quienes ven en su empresa militar un nuevo capítulo en la lucha de las potencias por las materias primas africanas. En un territorio con ingentes recursos naturales y donde cada día que pasa Occidente y Francia en especial pierde capacidad de influencia y negocios en favor del nuevo poderío chino. «Francia y sus aliados, como ya hicieran en Libia, también actúan en Mali para asegurarse los yacimientos mineros de la región», afirma Gilles Labarthe, autor de El oro africano.

Saqueo, tráfico y comercio internacional y una de las voces más autorizadas sobre neocolonización en África.Curiosamente, en aras de esta estabilidad, China, el gran competidor de Francia y Occidente en el teatro africano, apoyó la intervención, aunque lo hiciera tapándose la nariz. «China tiene intereses en Mali, proyectos de inversión, y le interesa la estabilidad explica He Wenping, director del programa africano en la Academia China de Ciencias Sociales y uno de los mayores expertos chinos en África. Ahora bien, la presencia de las fuerzas francesas en Mali, uno de los primeros países subsaharianos en establecer relaciones con Pekín, podría justificar la legalización de un nuevo intervencionismo. No se deben subestimar los intereses de Francia en Mali. Esta acción nos retrotrae a la gendarmerie africaine, el estatus colonial de Francia». Muchos analistas, de hecho, se preguntan si esta aventura significa, en realidad, el retorno de la françafrique, un término despectivo que describe la relación de patronazgo e injerencia que el Elíseo siempre mantuvo con países como Mali y sus siete vecinos Argelia, Mauritania, Senegal, Guinea, Costa de Marfil, Burkina Faso y Níger; todos ellos, antiguos súbditos de París.

Uranio, petróleo, gas, bauxita, diamantes, oro, hierro, cobre, litio, fosfato..., el Ministerio de Minas maliense presume de albergar en su territorio ingentes reservas; muchas de ellas, aún sin explorar, de todo tipo de materias primas. Según la organización Global Research, de hecho Mali es uno de los países con mayor potencial para las industrias extractivas de todo pelaje. La cuenca petrolífera de Taoudeni, sin ir más lejos, la mayor del noroeste africano, se extiende además de por Mauritania y Argelia por todo el norte del país, la región que hasta hace días estaba bajo control rebelde. Esta situación impidió a empresas como la francesa Total proseguir con sus prospecciones en la zona. «A fecha de hoy se desconoce el volumen de estos yacimientos explica Jesús García-Luengos, experto en recursos naturales del Grupo de Estudios Africanos de la Universidad Autónoma de Madrid. Se cree que serán muy importantes, aunque Total no ha notificado resultados positivos de sus trabajos en Mali».

En cuanto al uranio, las exploraciones anuncian inmensos depósitos en dos regiones: una de ellas, como ocurre con el crudo de Taoudeni, en plena zona rebelde, en el Adrar de los Iforas, ni más ni menos que el macizo montañoso donde se refugian hoy los yihadistas; el otro gran depósito de uranio se halla en el otro extremo del país y se extendería por una zona de 150 kilómetros cuadrados compartida con Senegal y Guinea. Según cálculos de Global Research, Mali podría producir cinco mil toneladas de uranio anuales.

Estos yacimientos, es indudable, deberían tener un gran valor para Francia, un país donde el 80 por ciento de la energía que consume es de origen nuclear y que importa todo el mineral atómico que necesita. «Los yacimientos en Mali, no obstante matiza García-Luengos, están aún lejos de ser una realidad. Para Francia, lo más inmediato desde el punto de vista económico y estratégico está hoy en las minas de uranio del vecino Níger». Allí, a unos 200 desérticos kilómetros de la frontera maliense, Areva el gigante mundial de la energía nuclear controlado por el Estado francés explota dos grandes yacimientos, Akokan y Arlit, y prepara la apertura para 2020 de Imouraren, que, se estima, será el segundo del mundo.

Polémica foto de un soldado francés en Mali.
En Níger, sin embargo, donde los franceses han extraído más de cien mil toneladas de uranio desde 1969, Areva ha vivido en los últimos años el final de un lucrativo monopolio. «La gestión de Areva ha sido siempre muy opaca señala García-Luengos, cofundador de Reset, un centro de estudios sobre Seguridad y Gobernanza Transnacional. En Níger, uno de los países más pobres del mundo, no es una empresa popular y tiene un largo historial de críticas, denuncias y acusaciones oscuras. Areva es el núcleo duro de toda esta cuestión».

En 2007, el presidente nigerino, Mamadou Tandja, que llegó a amenazar con vender el uranio a Irán, abrió el mercado a los chinos quienes ya controlan casi todo el petróleo nigerino subiendo, además, los precios de las concesiones y los derechos de explotación. Antes de aquella decisión, el país vivió un levantamiento tuareg, que reivindicaba un reparto justo de los beneficios del uranio. Desde entonces, la animadversión local hacia Areva no ha parado de crecer.

El nuevo presidente, Mahamadou Issoufu, elegido en abril de 2011, ya prepara un cambio drástico en las relaciones entre Níger, cuyo PIB apenas supera los seis mil millones de euros y Areva, una empresa con ingresos de nueve mil millones anuales que en 2012 anunció un crecimiento en su facturación de un seis por ciento y si el conflicto en la región no lo impide excelentes perspectivas para 2013. «El uranio apenas deja en Níger cien millones anuales. Es inadmisible», declaró Issoufu. Para García-Luengos, esta será la clave para el futuro de la acción de Francia en la región. «Si Issoufu cumple sus promesas de transparencia, rendición de cuentas y gestión de los ingresos del uranio en beneficio de las poblaciones locales, la relación con Areva podría cambiar».

Níger, en todo caso, no parece ser el único vecino estratégico en una región donde extensas y porosas fronteras suelen reducirse a una simbólica línea geográfica. Argelia, Mauritania, Senegal, Guinea o Burkina Faso también poseen minerales o hidrocarburos. «En términos de seguridad energética hay grandes intereses en la zona subraya García-Luengos y todas las potencias temen que el conflicto en Mali desestabilice la franja entera del Sahel [de Senegal a Sudán] e incluso Nigeria, que como séptimo productor mundial es un actor clave en el mercado del petróleo».

miércoles, 27 de febrero de 2013

¿Obama y Putin van a repartirse Oriente Medio?


Por THIERRY MEYSSAN

En un artículo publicado en Rusia el 26 de enero de 2013, Thierry Meyssan expone el nuevo plan de partición del Medio Oriente en el que trabajan actualmente la Casa Blanca y el Kremlin. El autor revela [o especula] los principales parámetros de la negociación en marcha sin emitir juicios sobre la posibilidad de un acuerdo definitivo ni sobre su aplicación. El interés de este artículo reside en que permite la comprensión de las ambiguas posiciones de Washington, que está empujando a sus aliados hacia un callejón sin salida para imponerles próximamente una nueva distribución de cartas que simplemente los deja fuera del juego.


El presidente Obama se dispone a cambiar completamente de estrategia internacional, a pesar de la oposición que ha suscitado su proyecto en el seno de su propia administración.

La situación es muy simple. Estados Unidos está a punto de alcanzar la independencia energética a través de la rápida explotación del gas de esquito y de las arenas bituminosas. Ese factor determina el fin de la doctrina Carter —adoptada en 1980—, según la cual la necesidad de garantizar el acceso al petróleo del Golfo era un imperativo de seguridad nacional. Lo mismo sucede con el acuerdo de 1954 en el que Washington se comprometía a proteger a la dinastía gobernante de Arabia Saudita a condición de que esta última garantizara el acceso de Estados Unidos al petróleo de la península Arábiga. Así que ha llegado el momento de decretar una retirada masiva que permitiría trasladar las tropas estadounidenses hacia el Extremo Oriente, para contrarrestar allí la creciente influencia de China.

Por otro lado, hay que hacer el máximo esfuerzo para impedir una alianza militar entre China y Rusia. Para ello es conveniente ofrecer a Rusia algo que desvíe su atención del Extremo Oriente.

Y para terminar, Washington ya se siente que no puede respirar a causa de su relación, demasiado estrecha, con Israel. Esta relación se ha hecho demasiado onerosa, resulta injustificable en el plano internacional, y está enemistando a Estados Unidos con los pueblos musulmanes en su conjunto. Por otro lado, resultaría conveniente castigar claramente a Tel Aviv por su escandalosa injerencia en la campaña electoral previa a la elección del presidente de Estados Unidos, donde el gobierno israelí apostó además en contra del candidato ganador.

Esos tres factores han llevado a Barack Obama y sus consejeros a proponerle un pacto a Vladimir Putin: Washington, reconociendo implícitamente su derrota en Siria, está dispuesto a aceptar que Rusia se instale en el Medio Oriente, sin que esta tenga que ceder nada a cambio, y a compartir con Moscú el control de dicha región.

A ese estado de ánimo corresponde la redacción, por parte de Kofi Annan, del Comunicado de Ginebra adoptado el 30 de junio de 2012. En aquel momento, el objetivo no era otro que hallar una salida a la cuestión siria. Pero aquel acuerdo fue saboteado de inmediato por varios miembros de la propia administración Obama que filtraron hacia la prensa europea diversos detalles sobre la guerra secreta contra Siria, incluyendo la existencia de una Presidential Executive Order en la que se orientaba a la CIA el despliegue de hombres y mercenarios en el terreno. Esa sorpresiva maniobra llevó a Kofi Annan a renunciar a sus funciones como mediador. La Casa Blanca, por su parte, prefirió mantener un perfil bajo para evitar que las divisiones existentes en el seno del ejecutivo saliesen a la luz en medio de la campaña para la reelección de Barack Obama.

En las tinieblas, 3 grupos se oponían en aquel momento al comunicado de Ginebra:

- Los agentes implicados en la guerra secreta,
- Las unidades militares a cargo del enfrentamiento con Rusia,
- Los defensores de los intereses de Israel.

Inmediatamente después de su reelección, Barack Obama emprendió la purga. El primero en caer fue el general David Petraeus, quien había concebido la guerra secreta contra Siria. Después de caer en la trampa sexual que le tendió una agente de la inteligencia militar, el director de la CIA se vio obligado a dimitir. Posteriormente, una docena de militares de alto rango fueron puestos bajo investigación por sospechas de corrupción. Entre ellos se encontraban el almirante James G. Stravidis, comandante supremo de la OTAN, y su sucesor designado —el general John R. Allen— así como el comandante de la Missile Defense Agency (o sea, el escudo antimisiles), general Patrick J. O’Reilly. Para terminar, Susan Rice y Hillary Clinton fueron blanco de recios ataques por haber ocultado al Congreso ciertos elementos sobre la muerte del embajador Chris Stevens, asesinado en Bengasi por un grupo islamista, probablemente por orden del Mossad.

Ya pulverizados o paralizados los elementos de oposición, Barack Obama anunció una profunda renovación de su equipo. Comenzó poniendo a John Kerry a la cabeza del Departamento de Estado. Kerry es partidario declarado de la colaboración con Moscú en temas de interés común. Es también amigo personal de Bashar al-Assad.

Obama continuó después con la nominación de Chuck Hagel para dirigir el Departamento de Defensa. Hagel, es uno de los pilares de la OTAN, pero es además un realista. Siempre ha denunciado la megalomanía de los neoconservadores y el sueño de imperialismo global del que son portadores. Es además un nostálgico de la guerra fría, aquella época bendita en que Washington y Moscú se repartían el mundo sin muchas complicaciones. Junto a su amigo John Kerry, Chuck Hagel organizó en 2008 un intento de negociación para tratar de que Israel restituyese a Siria la meseta del Golán.

Y, para terminar, John Brennan a la cabeza de la CIA. Este asesino a sangre fría está convencido de que la primera debilidad de Estados Unidos es haber creado y desarrollado el yihadismo internacional. Su obsesión es la eliminación del salafismo y el desmantelamiento de Arabia Saudita, lo cual aliviaría en definitiva la situación de Rusia en el norte del Cáucaso.

La Casa Blanca prosiguió al mismo tiempo sus conversaciones con el Kremlin. Lo que debía ser una simple solución para Siria se ha convirtido en un proyecto mucho más amplio de reorganización y partición del Oriente Medio.

Es importante recordar que, luego de 8 meses de negociaciones, el Reino Unido y Francia se repartieron en secreto el Medio Oriente (Acuerdos Sykes-Picot en 1916). El contenido de esos acuerdos fue revelado al mundo por los bolcheviques en cuanto llegaron al poder. Y así se mantuvo la situación a lo largo de un siglo. Lo que la administración Obama tiene ahora en mente es un rediseño del Medio Oriente para el siglo XXI, bajo la égida de Estados Unidos y Rusia.


En Estados Unidos, a pesar de que Obama se sucede a sí mismo, la administración saliente no puede hacer otra cosa que ocuparse de los temas corrientes. Y recuperará la totalidad de sus atribuciones sólo después de la ceremonia de juramente para el próximo mandato, el 21 de enero de 2013. Después de la investidura del presidente, habrá una audiencia en el Senado —el 23 de enero— donde Hillary Clinton será interrogada sobre el misterio del asesinato del embajador de Estados Unidos en Libia. El 24 de enero, tendrá lugar en el Senado la audiencia para la confirmación de John Kerry como secretario de Estado. Inmediatamente después, los 5 miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU se reunirán en Nueva York para examinar las proposiciones Lavrov-Burns sobre Siria.

Esas proposiciones prevén la condena de toda injerencia externa, el despliegue de observadores y de una fuerza de paz de la ONU, así como un llamado a los diferentes protagonistas para que formen un gobierno de unión nacional y planifiquen la celebración de elecciones. Es posible que Francia se oponga, pero sin llegar por ello a amenazar con recurrir al veto en contra de su amo estadounidense.

La originalidad del plan reside en que la fuerza de la ONU se conformaría principalmente con soldados de los países miembros de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC). El presidente Bashar al-Assad se mantendría en el poder, negociaría rápidamente una Carta Nacional con los líderes de la oposición no armada seleccionados con la aprobación de Moscú y Washington y sometería esa Carta al veredicto popular a través de la realización de un referéndum organizado y realizado bajo la supervisión de observadores.

Este sorprendente escenario fue preparado desde hace tiempo por el general sirio Hassan Tourkmani (asesinado en el atentado que estremeció Damasco el 18 de julio de 2012) y su homólogo ruso Nikolai Bordyuzha. Los ministros de Relaciones Exteriores de la OTSC adoptaron después el 28 de septiembre de 2012— una posición común sobre el tema y el departamento de la ONU a cargo de las operaciones de paz firmó con la OTSC un protocolo que otorga a esa organización prerrogativas similares a las de la OTAN. Bajo la denominación «Fraternidad inviolable», una serie de simulacros militares ONU/OTSC se desarrollaron en Kazajstán del 8 al 17 de octubre de 2012. Finalmente, un plan de despliegue de «chapkas azules» se discutió —el 8 de diciembre— en el Comité Militar de la ONU.

Después de la estabilización de Siria, una conferencia internacional por una paz global entre Israel y sus vecinos debería desarrollarse en Moscú. Estados Unidos estima que no es posible negociar una paz separada entre Israel y Siria porque los sirios exigen, en nombre del arabismo, que se resuelva primero la cuestión de Palestina. Pero tampoco es posible una negociación de paz con los palestinos, debido a la extrema división que reina entre estos últimos, a menos que Siria se encargue de obligarlos a respetar un acuerdo aceptado por la mayoría. Por lo tanto, toda negociación debe tener un carácter global, según el modelo de la Conferencia de Madrid (realizada en 1991). Según esa hipótesis, Israel se retiraría lo más posible hacia sus fronteras de 1967 y los territorios palestinos se fusionarían con Jordania para conformar el Estado palestino definitivo, cuyo gobierno estaría en manos de los Hermanos Musulmanes, lo cual haría esa solución aceptable para ciertos gobiernos árabes. Posteriormente, se devolvería a los sirios la meseta del Golán a cambio de que renunciaran al lago Tiberiades, conforme al esquema ya estudiado en 1999 durante las negociaciones de Shepherdstown (1999). Y Siria se convertiría en garante del respeto de los tratados por la parte jordano-palestina.

Como en un juego de dominó, habría ocuparse entonces del tema kurdo. Se desmantelaría Irak para dar nacimiento a un Kurdistán independiente y Turquía estaría llamada a convertirse en un Estado federal que concedería la autonomía a su región kurda.

Los estadounidenses desean llevar el rediseño hasta una fase en la que sacrificarían a Arabia Saudita, que ya ha dejado de serles útil. Ese país se dividiría en tres partes y algunas provincias pasarían a formar parte de la federación jordano-palestina o del Irak chiíta, conforme a un viejo plan del Pentágono titulado «Taking Saudi out of Arabia», que data del 10 de julio de 2002. Esa opción permitiría a Washington dejar en manos de Moscú una amplia zona de influencia, sin tener por ello que sacrificar parte de su propia influencia. Es un comportamiento similar al que ya pudo verse en el FMI cuando Washington aceptó aumentar el derecho de voto de los países miembros del grupo BRICS. Estados Unidos no cedió ni un ápice de su propio poder sino que obligó a los europeos a renunciar a una parte de sus votos para abrir espacio a los miembros del BRICS.

Este acuerdo político-militar va acompañado de un acuerdo económico-energético ya que lo que realmente interesaba a la mayoría de los protagonistas de la guerra contra Siria era la conquista de las reservas de gas de ese país. En efecto, importantes yacimientos de gas natural han sido descubiertos en el sur del Mediterráneo y en Siria. Con el posicionamiento de sus tropas en ese país, Moscú mejoraría su control sobre el mercado del gas para los próximos años.

El regalo de la nueva administración Obama para Vladimir Putin es también resultado de una serie de cálculos. Su objetivo no sólo es desviar a Rusia del Extremo Oriente sino también neutralizar a Israel. Si bien un millón de israelíes tienen también la nacionalidad estadounidense, hay otro millón de israelíes rusoparlantes. La presencia de tropas rusas en Siria sería un elemento disuasivo para evitar que los israelíes cedan a la tentación de atacar a los árabes y que los árabes ataquen Israel. Así que Estados Unidos ya no tendría que dedicar sumas astronómicas a la seguridad de la colonia judía.

La nueva distribución del juego obligaría a Estados Unidos a reconocer por fin el papel de Irán en la región. Washington quiere, sin embargo, la garantía de que Teherán va a retirarse de Latinoamérica, donde ha establecido numerosas relaciones, sobre todo con Venezuela. Se ignora aún cuál será la reacción iraní sobre este aspecto del dispositivo, pero Mahmud Ahmadinejad ya se ocupó de hacerle saber a Obama que está dispuesto a hacer lo que esté en sus manos para ayudarlo a distanciarse de Tel Aviv.

Hay perdedores en ese proyecto. En primer lugar, Francia y Gran Bretaña, que van a perder su influencia. Y después Israel, que perderá su influencia en Estados Unidos y se verá reducido a su justa dimensión de pequeño Estado. Finalmente Irak, que será desmantelado, y posiblemente Arabia Saudita que desde hace varias semanas viene haciendo desesperados esfuerzos por reconciliarse con todas las partes para tratar de escapar al destino que se le prepara.

Pero también hay ganadores. En primer lugar, Bachar al-Assad, hasta ayer tratado por los occidentales como un culpable de crímenes contra la humanidad y mañana glorificado como el vencedor de los islamistas. Y sobre todo Vladimir Putin, quien —gracias a su tenacidad a lo largo del conflicto— saca finalmente a Rusia de su «containment», le abre nuevamente las puertas del Mediterráneo y del Medio Oriente y obtiene el reconocimiento del predominio ruso sobre el mercado del gas.

martes, 26 de febrero de 2013

¡Es la lucha de clases, estúpidos!


Ramon Molina*


Primero nos hicieron creer que la economía era lo más importante. La frase "The economy, stupid" se hizo muy popular en la campaña de Clinton contra Bush, y después nuestros políticos y nuestros opinadores la repitieron hasta la náusea. Muchos se creyeron el "mantra"; unos lo aceptaron por indigencia intelectual y otros lo usaron por puro cinismo, pero cuando estalló la crisis, se cayó en la cuenta de que detrás de la economía se tomaban decisiones políticas que hacían que la economía nos afectara en un sentido o en otro según quien decidiera. Cuando la derecha triunfante en las urnas se decidió a destruir las conquistas sociales de más de treinta años y quedó claro que la política económica era sobre todo política, fue la misma política la que entró en el remolino de la desafección y la hostilidad por parte de la mayoría de la población.

Hemos llegado a un punto en que hay que pasar a una nueva fase de desmitificación del lenguaje políticamente correcto que nos atenaza. Nadie en sus cabales cree hoy que la economía es más importante que la política, pero por la misma razón, tampoco es creíble una política que no ponga en cuestión abiertamente a la economía. Una economía que nos ha recordado de forma brutal que la lucha de clases sigue estando vigente y que, al menos la derecha no lo olvida. El "que se jodan" gritado desde los bancos del PP en el Parlamento es mucho más explícito y clarificador que cualquier discurso. Si los ricos pueden pagar su sanidad, su educación y su protección policial, ¿por qué razón deberían detraer parte de sus rentas para seguir atendiendo a una masa de proletarios cuya principal misión en la vida debe ser producir plusvalía para asegurar la reproducción del sistema?

La devastación que se cierne sobre los no privilegiados es similar a la que produce una guerra. La burguesía está ganando de nuevo una guerra civil sin necesidad de declararla abiertamente, y reforzando su conciencia de clase a base de reducir al contrario a la impotencia: modifica leyes a su antojo, suprime derechos, incumple promesas. La izquierda, por el contrario, al aceptar reglas de juego comunes, deviene la imagen misma de la alienación y agiganta la distancia que la separa de las verdaderas aspiraciones populares. Los que sufren el paro, los desahuciados de sus casas, los que son mal y tarde atendidos en la sanidad, los que ven que sus hijos sin formación jamás pasarán de ser carne de cañón y mano de obra barata para el sistema, son más de cada día. Ya no se trata de un reducto de "lumpenproletariado" en los márgenes de la sociedad; ahora ya afecta a miles de familias que antes se sentían a salvo. El lumpen no vota ni actúa en política, pero los afectados de hoy y de mañana sí. Empieza a extenderse una desesperación creciente y la convicción de que mientras los políticos no sufran al mismo nivel que la mayor parte de la población la situación no comenzará a enmendarse. Los que ven acercarse la miseria, los que sangran, querrían ver sangrar a los responsables.

La vigencia de la lucha de clases ha golpeado sin miramientos a todos los que creían que ésta ya estaba superada por la historia y, aunque los ricos llevan muchos años de ventaja porque ellos jamás dudaron de ella, el resto de la población se verá en el imperativo, quiera o no, de buscar una salida. Que la izquierda sea capaz de ofrecerla antes que aparezca cualquier aventurero neofascista depende ante todo de un cambio de mentalidad, de lenguaje, de método y sobre todo de volver a situarse en el terreno que por tradición le corresponde en la vieja y nueva lucha de clases.


  * Profesor de Historia Económica en la Universidad de las Islas Baleares (UIB)

domingo, 24 de febrero de 2013

Doscientos desaparecidos, 'Fray Palo' y un Obispo en los altares

En Medina de Rioseco (Valladolid) desaparecieron 200 de los 4.000 habitantes en 1936. El Obispo de Palencia, canonizado en el año 2001, se congratulaba de la buena labor del misionero 'Fray Palo' en una población que antes tenía «muchos rojos». José Alfonso perdió 14 familiares.


En Medina de Rioseco (Valladolid) no hubo guerra. Ni juicios sumarísimos. Ni paseados. Cuando se produjo el golpe de Estado de 1936, el municipio, como la provincia vallisoletana, cayó en manos del autodenominado bando nacional. Sin embargo, alrededor de 200 personas desaparecieron en una población que apenas alcanzaba los 4.000 habitantes. El 5% de los habitantes. Se calcula que alrededor de 270 niños quedaron huérfanos y más de 100 mujeres, viudas.

La situación fue descrita por el alcalde falangista de la ciudad como «urgente» en un telegrama enviado al Gobernador Civil el 26 de diciembre de 1936. «Las necesidades benéficas urgentes esta Ciudad son motivadas por mujeres e hijos de individuos presuntos muertos a causa sucesos actuales (sic)», rezaba el telegrama. La situación, urgente para el alcalde, no lo era tanto para el obispo de Palencia, Manuel González García.

«Ayer tuve el gran consuelo de distribuir en Medina de Rioseco (antes muy frío y con muchos rojos) 2.500 comuniones y más de 1.000 confirmaciones, el pueblo consta de 4.000 almas. ¡Qué buen misionero es Fray Palo!», se vanagloriaba el obispo González García en una carta enviada al Cardenal de Toledo y primado de España, Isidro Gomá.

Telegrama del alcalde riosecano al Gobernador Civil en 1936.
El Obispo González falleció en 1940. No obstante, fue beatificado por el papa Juan Pablo II en 2001, quien destacó en la ceremonia que González había sido en vida «un modelo de fe eucarística cuyo ejemplo sigue hablando a la Iglesia de hoy». La decisión del papa sentó como un jarro de agua fría en parte de la población vallisoletana que no daba crédito a la actitud de la Iglesia.

Estampa del obispo canonizado por Juan Pablo II.
Catorce familiares desaparecidos

El drama que vivió Medina de Rioseco se personifica en el caso de José Alfonso, un hombre de 76 años que ni siquiera había nacido el 18 de julio de 1936. José Alfonso nació el 13 de enero de 1937. Para entonces, su padre, guardia municipal, había desaparecido cuando se encontraba convaleciente en el hospital de tres disparos recibidos por parte de un miembro de Falange. Nadie vio nada durante años. Nadie lo volvió a ver. Con el paso de los años, salieron los testimonios. A su padre se lo había llevado un grupo de falangistas entre los que se encontraba el autor de los tres disparos.

La desaparición de su padre no fue la única de la familia. También desaparecieron sin dejar rastro su abuela, tres hermanos y una hermana de su padre, el novio de la hermana, cinco primos, una prima y un tío segundo. Catorce desaparecidos en total. No lo hicieron a la vez. Fueron desapareciendo paulatinamente. A unos los buscaban en su casa, los metían en una furgoneta y nunca más aparecían. A otros los citaban en el Ayuntamiento y jamás regresaban. Nunca se encontraron sus cuerpos.

José recita los nombres de sus familiares. No los conoció, pero recuerda el nombre y las circunstancias de cada uno de ellos. «José, Vicenta, Joaquina, Presbiterio, Manuel, María, Mariano, Gabriel, Emeterio padre, Emeterio hijo, Custodio, José, Manuel y Félix», recuerda para Público José, que no conoció la figura de su padre hasta la adolescencia. Antes, pensó que su padre era militar porque lo único que conocía de él era una foto durante el servicio militar obligatorio.

«La desgracia se cebo en la familia de mi padre con saña. Llegué a pensar que tenían que haber hecho algo malo para que recayera sobre ellos ellos tanto castigo. Con el tiempo se da uno cuenta que no es así, sino que estaba inscrito en el pensamiento de estos genocidas. Tenían una lista negra y la familia de mi padre estaba en ella por estar vinculada a PSOE y UGT», resume José, que recuerda como siendo aun niño era señalado en el pueblo como rojo siendo el centro de miradas, críticas e insultos...

La razón perdida

Su madre nunca quiso hablar del tema. Lo poco que contó lo hizo a regañadientes, cuenta José. Ella, complemente sola, tuvo que hacer frente a la alimentación de José y su hermana, Libertad, cinco años mayor que él. Sirvió en dos «casas de señoritos», trabajaba en el campo y hacía la colada para varios vecinos. Los bienes de sus familiares también le fueron usurpados por los vencedores de la guerra. Su madre, Vicenta, no tenía derecho a nada como mujer de un rojo. Ni siquiera a criar a sus hijos.

Cuando José cumplió los cuatro años, Vicenta fue obligada por parte de las clases altas del pueblo a ceder la custodia de sus hijos a Auxilio Social. «Los que habían matado a toda mi familia querían educarnos a nosotros para que no fuéramos rojos como nuestros padres», señala José. Su madre, la señora Vicenta, no pudo superar este paso. La distancia con los hijos, el recuerdo de su marido, las interminables jornadas de trabajo acabaron con su salud mental e ingresó en un manicomio.

Hoy, Vicenta descansa en el cementerio con una tumba a su lado con el nombre de su marido. «Así lo ordenó ella. Sus últimos días mi madre se preguntaba en voz alta que qué habría sido de mi padre y se respondía a sí misma que estaría en cualquier cuneta. Nos decía que si algún aparecía el cuerpo de mi padre lo enterráramos a su lado. En la Ciudad de Medina de Rioseco hay una tumba esperando tal acontecimiento», cuenta José.

Coral de la Casa del Pueblo de Medina.
La tragedia como norma

La tragedia de la familia Alfonso, primer apellido de José, fue compartida por otras en Medina de Rioseco y en el resto de España. Cuenta Julio del Olmo, presidente de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Valladolid, que era habitual que desaparecieron más de un miembro de cada familia, así como la preocupación del Régimen por hacerse cargo de los hijos de los represaliados. «Para las viudas no había nada. Para los hijos intentaban meterlos en la senda católica y darles un mínimo de futuro. Aun eran salvables. Es este espíritu católico», señala.

En Medina de Rioseco se cuentan otros casos similares como el de José María, un niño de apenas tres años, que en 1936 perdió a su madre, su tío y a su abuelo. Su padre desapareció en 1937. «Otra mujer vio como el mismo día un camión se lleva de su casa a su padre y a su madre cuando ella tenía siete años», apunta Julio.

José Alfonso rehizo su vida y, al contrario de lo que siempre pensó, no cayó «en la delincuencia». Ahora, con 76 años, sentado frente a su ordenador, mientras escribe sus memorias, espera encontrar a través de internet compañeros de los diferentes orfanatos y centros de Auxilio que visitó. Sin embargo, y a pesar de las veces que lo ha meditado hay una cosa que José sigue preguntándose sin parar: «¿Por qué?»

«Muchas veces a lo largo de mi vida escuché decir que los rojos habían matado tanto como los nacionales, pero en mi pueblo, que se sepa, solo fue asesinado un guardia civil en la fallida revolución de 1934. Durante la guerra sólo desaparecieron los que ellos llamaban rojos pero que no eran más que gente que no pensaba como ellos y que habían ganado las elecciones. Sólo puedo concluir que la guerra se produjo porque los dueños de España no podían consentir que les quitaran el poder democráticamente. Y hasta los días de hoy estamos sufriendo las consecuencias de los actos de los que se creen los dueños de España», sentencia José Alfonso.

viernes, 22 de febrero de 2013

El mayor secreto de China


 China es un país de misterios, pero ninguno tan grande como el de su naturaleza salvaje. Enormes extensiones de montañas y desiertos albergan sorprendentes y exóticas criaturas; muchas, desconocidas. Para muestra, un botón: uno de cada ocho mamíferos del planeta —sin incluir los humanos— son chinos... En el inmenso país asiático hay mucho más que osos panda.

Fernando González-Sitges

Un ruido a su espalda le hizo girarse. Algo andaba por aquel bosque de Fanjin. De detrás de un tronco grueso cubierto de líquenes y musgos surgió una criatura desconcertante que se irguió sobre sus cuartos traseros y se paró mirándolo con intensidad.

Era un ser extraño y peludo, con el aspecto de un mono pero con una cara humanoide chata y de color azul. Su pelo, largo e hirsuto, le caía por la espalda en una gruesa capa de color dorado. Y su mirada inteligente analizaba al forastero con minuciosidad. Detrás de él surgieron varias caras más. Todo un grupo de aquellos seres lo miraban. Entonces, la primera de las criaturas frunció su labio superior y mostró unos desconcertantes y aguzados colmillos. Echó a correr ladera abajo. Estaba convencido de haber tenido un encuentro cara a cara con un yeti y su familia. O con unos demonios de los bosques. Lo que no podía imaginar era que había tenido la fortuna de encontrarse con un grupo de los escasos monos dorados.

A pesar de que China está en boca de todos desde hace años y de que cuenta con un patrimonio natural extraordinario, nadie, ni siquiera los chinos, parece conocerlo. Y hablamos de un país que cuenta con las mayores montañas de la Tierra, el mayor desierto de arena del mundo, el desierto más boreal de cuantos existen —y el más frío— y la zona cárstica más extensa del planeta. En su interior viven un octavo de todas las especies de mamíferos del planeta, más de 1.300 especies de aves, 2.200 de peces de agua dulce y cerca de 33.000 referencias botánicas, lo que convierte a China en el tercer país más rico en plantas del mundo tras Brasil y Malasia.

El hermetismo del Gobierno chino, temeroso de la imagen negativa que le pueden dar aspectos como la contaminación de sus aguas, el envenenamiento del aire de sus ciudades, la destrucción del paisaje en aras del desarrollo o el tráfico de especies para su medicina tradicional, ha hecho de su naturaleza una desconocida. Miles de especies pueblan sus selvas, bosques, desiertos y montañas sin que los occidentales ni los chinos las conozcan. Y no hablamos solo de animales pequeños. En China hay elefantes, tigres, leopardos, osos... y animales cuyo nombre dejaría indiferente a la mayoría, pero que suponen auténticas joyas dentro de la zoología. Este es el caso del takin, un animal que parece una mezcla de ñu, yak y carnero, cuyo pelo largo y dorado dio lugar a una leyenda oriental similar a la del vellocino de oro de Jasón y los argonautas. O de la salamandra gigante china, el anfibio más grande del mundo.


Hay también elusivas panteras nebulosas de una belleza sobrecogedora, carneros azules que ya deslumbraron a Marco Polo y una variedad de faisanes como no se conoce en otra parte del mundo. Incluso algunas de sus especies más conocidas, como el panda gigante, han llevado de cabeza a la comunidad científica, que no conseguía determinar a qué grupo de animales pertenecía hasta que, finalmente, lo clasificaron dentro del grupo de los osos. La lista se hace interminable, pero casi nadie sabe siquiera que existe.Pese a que China cuenta con 2.194 reservas naturales que cubren el 15 por ciento del país —por encima de la media mundial, que está en un 11,5%—, muchas de estas joyas zoológicas están en peligro de extinción.

La medicina china consume todo o algunas de las partes de muchos de estos animales, las reservas y los santuarios no cuentan con recursos como para luchar contra los furtivos y las infraestructuras en muchos de estos santuarios brillan por su ausencia. El Gobierno chino está empezando a poner en práctica importantes proyectos de conservación, pero no hay investigadores de campo ni zoólogos que trabajen sobre el terreno. Y estamos hablando de un territorio salvaje de cinco millones de kilómetros cuadrados. Nadie puede asegurar qué hay en ellos pero seguro que quedan cientos de especies por descubrir.





El yeti y otros animales

En China hay monos de aspecto tan desconcertante que son responsables, en parte, de muchos 'avistamientos' del yeti, la criatura a la que los tibetanos del Himalaya llaman Migou. Uno de ellos es el mono dorado. Un duende de 3.500 años. En los dibujos y en las cerámicas chinas del 1500 antes de Cristo ya se representaba lo que los primeros occidentales denominaron «un duende de nariz respingona». Ese animal no era otro que el langur chato dorado o mono dorado.

Fue bautizado Rhinopithecus roxellana en honor a una amante del sultán Solimán II que tenía la nariz respingona. Aunque su rostro circula por Internet por su similitud con la nariz de Michael Jackson. El dorado es el único mono habituado a la nieve. Aunque no está claro por qué tiene el hocico plano, una explicación es que evolucionó para combatir el frío extremo: una nariz carnosa, expuesta y sin pelo podría congelarse.


El pagolín chino

Terror de las termitas, el pangolín chino beneficia al hombre: consume hasta 70 millones de termitas al año. Aun así, está en extinción: su carne se considera un plato delicioso y la medicina tradicional china 'receta' sus escamas.


El panda rojo

Una especie única, el panda rojo (hun-ho, 'zorro de fuego') fue incluido por error primero en la familia de los mapaches y luego en la de los osos. Tras estudiar su ADN, los expertos lo enclavaron en una familia diferente y única: Ailuridae.


La pantera nebulosa

Si parpadea, se la pierde, la pantera nebulosa es quizá el felino más difícil de observar. Su vida en las selvas más impenetrables, su actividad arborícola y sus hábitos nocturnos la han convertido en un fantasma de las junglas chinas. Entre sus singularidades: sus colmillos, los más largos en relación a su tamaño entre todos los felinos.


La gran salamandra china

Una de las rarezas más espectaculares: la salamandra china gigante, el anfibio más grande del mundo. De casi dos metros de largo, es completamente inofensiva para el hombre. Está en peligro de extinción por la contaminación de los ríos y su utilización en la medicina tradicional china.


El faisán dorado

El más vistoso, el faisán dorado fue la primera ave ornamental traída a Europa desde China, en el siglo XVIII. Es una de las decenas de especies de faisanes de los bosques de China y una de las pocas detalladamente conocidas.


El chiru

En las estepas del Tíbet vive el chiru o antílope tibetano. Hace 50 años quedaban un millón de ejemplares; hoy, menos de 75.000. La causa: la lana extraordinaria que esconden bajo el pelo, mucho más suave y tan fina que solo los artesanos de Cachemira saben trabajarla y elaborar los carísimos shahtoosh, un tipo de chal para el que hay que sacrificar entre tres y cinco chirus.

domingo, 17 de febrero de 2013

Fuga en el depósito nuclear más antiguo de EEUU, cuna de la bomba de Nagasaki


RT

La Reserva Nuclear de Hanford, sitio del primer reactor de plutonio a gran escala en el mundo y uno de los depósitos más contaminados en EEUU, presenta una fuga de residuos nucleares, según funcionarios estadounidenses.

La Reserva Nuclear de Hanford almacena residuos derivados de la producción de armas atómicas en tanques que ya han superado sus 20 años de vida útil. El viernes el Departamento de Energía de EEUU anunció que en uno de los 77 depósitos se detectó una fuga con un ritmo de pérdida de 1.100 litros anuales en el tanque T-111, construido entre 1943 y 1944, que ahora contiene unos 1.700 litros de estiércol líquido altamente radiactivo resultante de la producción de plutonio de las armas nucleares.

«Estoy alarmado por esto en muchos sentidos», reconoció el gobernador de Washington Jay Inslee. «Esto plantea preocupaciones, no sólo acerca de la fuga existente [...], sino también acerca de la integridad de otros tanques de esta antigüedad», añadió.

El gobernador aclaró que otros tanques del sitio han sido examinado ahora y que en la actualidad «no hay riesgo inmediato para la salud pública».

Establecida en 1943 como parte del proyecto Manhattan para construir la bomba nuclear, Hanford se convirtió en el sitio del primer reactor de plutonio a gran escala en el mundo. El material atómico producido allí se utilizó en la bomba lanzada contra Nagasaki en 1945.

Se estima que los 3,7 millones de litros de residuos filtrados en más de 70 años ponen en peligro el medio ambiente local del río Columbia.

sábado, 16 de febrero de 2013

«Es mejor no apagar los fluorescentes, porque consumen más energía en el momento de encenderlos»


Por DANIEL CLOSA I AUTET

Esta es una de aquellas afirmaciones de la que circulan diferentes versiones, según donde busques. Hay revistas que aconsejan que, si hemos de salir de una habitación durante unos veinte minutos, resulta más económico dejar el fluorescente encendido en vez de apagarlo y volverlo a encender. En otros lugares el periodo de tiempo a partir del cual resulta mejor dejar encendido el fluorescente se reduce a cinco minutos. Y otros lugares simplemente no especifican ningún tiempo.

El caso es que, efectivamente, un tubo fluorescente gasta mucha más energía en el momento de encenderse que cuando ya está iluminado. En el momento de encenderse puede llegar a consumir hasta cinco veces más energía que durante el resto del tiempo. Una diferencia que no se observa en las bombillas corrientes. Éstas consumen más energía mientras están encendidas, pero no hay este pico de consumo en el momento de encenderlas.

De manera que parecería que efectivamente resulta práctico evitar los aumentos de consumo energético asociados al momento de encender el fluorescente, y que si hemos de salir de la habitación durante un rato tal vez ahorraremos energía evitando apagar y volver a encender el tubo.

Puede parecerlo, pero el caso es que no es así.

La clave del problema se esconde en el tiempo que tarda en encenderse un fluorescente. Decimos que en este momento gasta unas cinco veces más que en funcionamiento «normal», pero este aumento de consumo, este momento, ¿cuánto tiempo dura?

Pues para saberlo he ido a encender el fluorescente de la cocina y he visto que en dos o tres segundos ya está encendido. De manera que durante tres segundos gasta cinco veces más que el resto del tiempo. Esto quiere decir que el encendido del fluorescente equivale a unos quince segundos de funcionamiento normal.

Por lo tanto, razonar que es mejor dejarlo encendido únicamente tendrá sentido si tengo que salir (y apagarlo) y volver a entrar (y volverlo a encender) ¡en menos de quince segundos!

Otras veces se dice que el problema no es del consumo de energía, sino del desgaste del fluorescente. Cuanto más lo encendemos y apaguemos, la vida de los componentes del fluorescente irá disminuyendo. Los fabricantes de fluorescentes ofrecen fórmulas y gráficos que muestran cómo varía la vida del fluorescente según el número de veces que se enciende.

 
De nuevo, es cierto que el fluorescente tendrá una vida más larga si lo encendemos y apagamos menos veces. Pero, de nuevo también, la diferencia en la práctica es lo bastante pequeña como para que resulte mejor apagar la luz si tenemos que marcharnos más de unos pocos minutos.

Todo ello es un caso típico de razonamiento hecho por alguien a partir de datos correctos, pero que a la hora de pasarlos a la vida real no se tomó la molestia de hacer los cálculos para ver si tenían aplicación o si resultaban simplemente anecdóticos. Ciertamente, podemos decir que no es un mito y que en determinadas condiciones resulta más económico dejar el fluorescente encendido. Pero estas condiciones simplemente no tienen aplicación en la práctica. En realidad, si hacemos caso del mito, gastaremos más energía, en lugar de ahorrar, cada vez que dejamos un fluorescente encendido durante veinte minutos pensando que así consume menos que apagándolo y volviéndolo a encender.

LECTIO EDICIONES, 2012

jueves, 14 de febrero de 2013

La patronal también la pagas tú

Ignacio Escolar
Periodista

Domingo, 10 de febrero del 2013

La inmensa mayoría de empresarios honestos de este país deberían corear un famoso lema del 15-M y dedicárselo con un corte de mangas a la cúpula de la patronal: «¡Que no nos representan, que no!». La CEOE, que tantas lecciones da sobre el esfuerzo y la austeridad de los demás, arrastra un oscuro presente y un impresentable historial. Es una organización que ya está tardando en abrir las ventanas, limpiar bajo las alfombras y pedir públicamente disculpas a la sociedad.

La trayectoria de sus últimos dirigentes es como para hacérselo mirar. José María Cuevas, su histórico presidente, ni siquiera fue empresario; su hijo (al fin un emprendedor en la familia) acaba de ser detenido en una operación contra el blanqueo de capitales. Su sucesor, Gerardo Díaz Ferrán, está en la cárcel, acusado de gravísimos delitos; es el mismo moroso que no pagaba a sus empleados pero tenía dinero para donar varios cientos de miles de euros a Fundescam que se gastaron en la campaña electoral de su amiga, la regeneradora Esperanza Aguirre. Y quien sustituyó a Díaz Ferrán, Juan Rosell, ha tenido esta semana dos patinazos cada uno de los cuales justificaría por separado una dimisión. El primero, asegurar que esos 7,5 millones de euros en «donaciones» que aparecen registrados en los presuntos papeles de Bárcenas tienen poca credibilidad porque son «cantidades ridículas» (¿cuántos ceros hacen falta para que los donativos se parezcan a los de verdad?). El segundo, negar las cifras de paro. Para la marca España, es ideal que el presidente de los empresarios cuestione la estadística oficial.

Rosell también soltó el viernes en la SER una frase para enmarcar: «En la empresa pública ni se controla ni se evalúa». El cazo se lo dice a la sartén. En el 2010, la CEOE gestionó 587 millones de euros. Por comparar, el presupuesto del Congreso y del Senado (141 millones entre ambas cámaras) no llega ni a la mitad de la mitad. El 68% de esos fondos, unos 400 millones, son subvenciones, pagadas por los contribuyentes. La mayor parte de su dinero es público, pero sus cuentas son opacas. La CEOE solo presenta anualmente un mínimo resumen, con menos detalles que el salpicadero de un Seat Panda y solo de la cúpula central. Hablamos de una organización que cuenta con nueve vicepresidentes, una junta directiva de 221 miembros, 486 sedes por toda España y 3.729 empleados. Son los mismos que pregonan la austeridad, llaman vagos a los funcionarios y critican la «mastodóntica» Administración. Son también los que pedían abaratar el despido pero aprobaron una indemnización de 1,9 millones de euros para uno de sus exdirectivos.

El PP planteó esta semana que la futura ley de transparencia afecte también a partidos y sindicatos, como receptores de dinero público. Me sumo a la propuesta, pero que la amplíen también a la patronal.


miércoles, 13 de febrero de 2013

Los chavales creen que los niños son más tontos y traviesos que las niñas


Unos ensayos británicos sugieren que la diferencia de rendimiento entre sexos obedece a los mensajes que reciben

EMILIO DE BENITO

Los niños (en genérico) tienden a adaptarse a lo que oyen. Y, en concreto, los chicos (varones) tienen asumido lo que se dice de ellos: que son más torpes que las niñas. Una serie de ensayos realizados en Reino Unido, y publicados en la revista Child Development, pone de manifiesto que el mensaje cala en los críos desde pequeños, y que condiciona sus resultados escolares.

En uno de los trabajos realizados por Bonny Hartley, de la Universidad de Kent, los investigadores preguntaron a 238 niños y niñas de entre 4 y 10 años quién creía que era el protagonista de una historia. Para ello, usaban una formulación neutra, 'the child', que sirve tanto para críos como para crías. Las historias eran del tipo «'the child' quiere aprovechar las clases» o «'the child' no saca buenas notas», y luego se les pedía que identificaran si las protagonizaba un niño o una niña. El resultado era que lo masculino se asociaba a lo negativo, y lo femenino a lo positivo.

Para saber por qué sucedía esto se hicieron dos otros dos experimentos. En uno, con 162 niños y niñas, se los dividió en dos grupos y se les pusieron unas pruebas. A uno de ellos se les dijo que los chicos lo iban a hacer peor que las chicas. Y lo hicieron no solo peor que sus compañeras, sino peor que los chicos del otro grupo, a los que no se les había dicho nada. De alguna manera, su rendimiento mostraba que habían interiorizado el mensaje.

En el tercero de los ensayos se cogió otro grupo de 184 niños y niñas, se los dividió en dos y a unos se les dijo que se esperaba que el resultado fuera igual para ambos sexos. No fue exactamente así, pero los chicos mejoraron respecto al grupo de control.

La conclusión apunta a que los pequeños, de alguna manera, adaptan su comportamiento a lo que se espera de ellos. Y confirma otros estudios que indican que esta es la causa, por ejemplo, de que los niños se orienten más hacia carreras de ciencias y las niñas a las de letras.

También ofrece enseñanzas para el debate de la educación segregada. «En muchos países, los niños van por detrás de las niñas en el colegio», ha dicho Hartley. «Estos estudios sugieren que los estereotipos académicos negativos referentes a los niños se adquieren en los primeros años de la educación infantil y tienen como consecuencia su autocumplimiento. También sugieren que es posible mejorar el rendimiento de los varones y así cerrar la grieta entre sexos mediante mensajes igualitarios y superando la idea de hacer clases diferenciadas».