sábado, 31 de mayo de 2014

Los infames

ANTONIO GALA

Si hay una causa de odio en mí procuro siempre eliminarla. Sin embargo, comprendo que la que me lo provoca con mayor abundancia es la de quien procura enriquecerse a costa de infringir la ley y usarla contra los otros. Es extraño que, ahora, cada día no me produzca el retortijón de una posibilidad negativa en mis sentimientos. Gentuza, alta o baja, que sale y entra de las cárceles; que nunca hace nada a favor de nadie; que se dedica a afinar sus formas de robar a sus vecinos, o a sus compatriotas, a todo el que se le pone al alcance de sus manos ladronas. Me refiero a quienes, por ejemplo, consiguen con trampa la adjudicación de una obra pública, y a continuación falsean los precios de su costo para enriquecerse robando al bien común. A los hipócritas, tan frecuentes en circunstancias como las de hoy y entre los españoles (?) de hoy, les negaría sin dudarlo la nacionalidad muy poco antes de tirarlos al mar. Casos como algunos, en los que ahora pienso, son un lastre para la convivencia, no digo ya para el progreso común y la común ventura. Cuanto antes mueran, mejor. Y cuanto antes desaparezcan los que los benefician, antes alcanzaremos la España verdadera. Porque de España hablo. Y sabéis ya a quiénes me refiero.



viernes, 30 de mayo de 2014

Bakunin visto por Kropotkin



El viejo Blanqui muchas veces decía que el significado de los acontecimientos no se mide de acuerdo con sus resultados in­mediatos sino según sus consecuencias indirectas, que resultan siempre mucho más importantes.

Se aplica exactamente al hablar de Bakunin. Se debe apre­ciar su papel no en razón de lo que hizo él mismo, sino en razón de la influencia que ejerció sobre los hombres que lo rodeaban, sobre su pensamiento y su acción.

Su herencia intelectual no es grande. Estatismo y anarquía, El desarrollo histórico de la Internacional [1], Dios y el Estado son los tres libros suyos no muy grandes; el resto El Imperio knuto-germánico, las Cartas a un francés sobre la crisis actual, La teología política y Mazzini, Los Osos de Berna, etc., son folletos escritos sobre temas de actualidad. E incluso los tres libros, ya citados, tienen un origen idéntico. Bakunin se ponía a redactar un folleto sobre una cuestión del día pero el folleto se convertía en un libro, porque, con su inteligencia profunda de la filosofía de la historia y su amplio conocimiento de los acon­tecimientos contemporáneos, tenía tanto que decir que las pá­ginas se agregaban unas a otras.

Si recordamos todo lo que él y sus amigos (y sus amigos eran Herzen [en ruso, Guertsen], Ogariov, Mazzini, Ledru-Rolin y todos los actores más notables del período revolucionario de los años 1840-50 en Europa), habrían debido pensar ante aquellos dramas, aque­llas esperanzas, aquellas desilusiones, vividas por ellos; si re­cordamos todo lo que tuvieron que sentir durante el año 1848, tan lleno de esperanzas, y durante la reacción que siguió, es fácil comprender por qué las ideas, las imágenes, los argumen­tos, sacados del conocimiento de la vida, bullían en la cabeza de Bakunin y por qué sus enfoques filosóficos e históricos son siempre tan ricamente llenos de hechos y juicios relativos a la actualidad.

Sin embargo es interesante apuntar que cada folleto de Bakunin marca un hito en la historia del pensamiento revolu­cionario en Europa. Su discurso en el congreso de la «Liga de la Paz y de la Libertad» era un desafío a todos los radicales de Europa. Bakunin declaraba que la era del radicalismo de los años 1840-50 había terminado y que una nueva fase del pensa­miento revolucionario se iniciaba: la era del socialismo obrero. Al lado de la cuestión de la libertad política se planteaba el problema de la independencia económica, que iba en adelante a ser predominante en la historia. Su folleto dirigido a los mazzinistas anunciaba el fin de la conspiración, puramente política y revolucionaria, por la emancipación nacional, y el principio de la revolución socialista. Él anunciaba también el fin, en la historia, de un cristianismo sentimental y socialista, y el comienzo de un realismo ateo y comunista. Su carta a Herzen sobre la Internacional [2] y sobre el realismo de Bazarov tenía la misma significación para Rusia.

Los Osos de Berna son una despedida al democratismo bur­gués suizo; las Cartas a un francés, escritas durante la guerra de 1870-71, señalan la muerte del radicalismo de Gambetta y el de una nueva era que pronto iba a inaugurar la Comuna de París, rechazando la idea socialista-estatista de Louis Blanc y proclamando una idea nueva, la del comunismo de los munici­pios y de las ciudades. La Comuna, alzándose por la defensa de su territorio y empezando en su seno la revolución social, esto aconsejaba Bakunin en estas Cartas, para oponer a la invasión alemana.

El Imperio knuto-germánico, este folleto que los socialde­mócratas alemanes tanto aborrecen, es el grito profético de un viejo revolucionario que, ya en ese momento (en 1871), com­prendía todo el horror de la reacción que iba a pesar sobre Europa con una duración de 30 a 40 años tras el triunfo del Estado militar de Bismark, y también del socialismo estatalista, cuyo padrino en Alemania fue el mismo Bismarck. Este folleto señalaba al mismo tiempo un cambio brusco, en los países lati­nos, en dirección del comunismo antiestatalista, del anarquismo.

Por fin, Estatismo y anarquía, El desarrollo histórico de la Internacional y Dios y el Estado, a pesar de la forma de panfle­tos combativos, puesto que se escribieron con la rabia del mo­mento, contienen, para un lector atento, más pensamiento po­lítico y una mejor inteligencia filosófica de la historia que la gran masa de los tratados universitarios y social-estatistas, que ocultan la ausencia de pensamiento, con una dialéctica oscura, confusa, por consiguiente mal reflexionada. En estos libros de Bakunin no hay recetas ya preparadas. Quienes esperan que un libro resuelva todas las dudas, sin que tengan que pensar por sí mismos, no lo hallarán en Bakunin. Pero si somos capaces de pensar de modo independiente, sin seguir a ciegas al autor, con­siderando el libro como un material para el pensamiento —como una conversación inteligente que provoca en nosotros el traba­jo intelectual—, entonces las generalizaciones ardientes, ya des­ordenadas, ya brillantes, de Bakunin serán una ayuda para nues­tra educación revolucionaria infinitamente más que todos esos tratados que se escriben para persuadirnos que sólo somos bue­nos para obedecer y que debemos seguir ciegamente en el pen­samiento al autor y en la acción al jefe.

Además, la principal fuerza de Bakunin no radicaba en sus escritos. Estaba en su influencia personal sobre los hombres. Él hizo que Bielinsky se volviera para Rusia el tipo de revolucio­nario incorruptible, socialista y nihilista, que iba más tarde a encarnar nuestra maravillosa juventud de los años 1870. Él hizo que renaciera: «Eres mi padre espiritual», le escribía el mismo Bielinsky. Y sabemos qué fuerza fue Bielinsky [3] en la evolución de Rusia.

En París, en 1847 (el año en que fue expulsado) y en Alema­nia en 1848, su influencia sobre los mejores hombres de su tiem­po fue enorme. Bernard Shaw cuenta con una forma en parte humorística (The perfect Wagnerite) que Wagner representó a Bakunin bajo los rasgos de su Siegfried, que no conoce el miedo y lleva a Brunhaut por su amor. Desde luego, no es a Bakunin en particular al que se representa así, sino al revolucionario en general, lleno de coraje y audacia. Pero no cabe duda que tanto en Wagner como en George Sand, en Herzen y Ogariov, en todo el grupo socialista francés que estaba en aquel entonces en Pa­rís y en la Joven Alemania, y sobre la Joven Italia, y sobre la Joven Suecia, la influencia de Bakunin fue enorme. «No es po­sible acercarse a él sin estar contagiado por su ardor revolucio­nario», decían sus contemporáneos.

Y era aún el mismo hombre cuando, tras su fuga en 1861 de Siberia, volvió a aparecer entre sus amigos en Londres. Herzen, como se sabe, describió su aparición en Londres y con un tono medio burlón la propaganda que Bakunin lanzó entre los eslavos [4]. Es muy posible, e incluso cierto, que Bakunin a me­nudo colocaba, en los hombres que se le acercaban, más espe­ranzas de lo que merecían. ¿Pero acaso otro tanto no se podrá decir de Mazzini y de todo revolucionario sincero? Y quizá la potencia mágica que él poseía venía precisamente de que creía en el hombre, en lo que la gran obra que le confiaba iba a des­pertar en él lo mejor. Y él lo despertaba, en efecto, y la persona, bajo la influencia de Bakunin, dedicaba ya a la revolución lo mejor de sí mismo.

Herzen cuenta con tono de broma cómo Bakunin adoctrinaba a la gente, lanzándola a la acción. ¿Acaso estaba tan equivocado en su apreciación de los hombres? Quienes ins­piró en Italia, en Suiza, en Francia: Varlin, Eliseo Reclus, Cafiero, Malatesta, Fanelli (su emisario en España), Guillaume, Schwitzguebel, etc., agrupados enderredor suyo en la célebre Alianza, ¿no eran los mejores hombres de las razas latinas en esa gran época? Me parece que su apreciación de los hombres era, al contrario, sorprendentemente justa. Leamos, por ejem­plo, lo que escribía respecto de Nechaiev, cuyas vertientes fuer­tes y débiles supo caracterizar tan atinadamente que no pode­mos añadir nada [5]. ¿Y quién mejor que él comprendió a Nico­lás Utin, ese ídolo de los marxistas de Ginebra?

Una observación más. Lo que es más llamativo y más alec­cionador para nosotros es el nivel moral elevado de los hom­bres que, en Europa occidental, se juntaban con Bakunin. No conocí a Bakunin, pero intimé con la mayor parte de los hom­bres que lo rodearon en la Internacional y por eso fueron perse­guidos de modo tan inexorable por Marx, Engels y Liebknecht. Y puedo afirmar resueltamente, frente a sus enemigos, que cada uno de esos militantes de la Internacional federalista que acabo de nombrar era una personalidad moral de primer orden. La historia, lo sé, confirmará esta apreciación y no dejará, al mis­mo tiempo, de echar de menos que en el campo de sus adversa­rios, entre los principales jefes por lo menos, se hallaba inteli­gencia, pero la base moral distaba mucho de alcanzar la altura y la firmeza que presentaban esos amigos de Bakunin.

En lo que concierne la importancia de la actividad de Bakunin en la Internacional, caractericé el papel de los bakuninistas al hablar de la Federación Jurasiana en mis Memorias de un revo­lucionario [6].

En el momento en que la derrota de Francia, el exterminio de los proletarios franceses después de la Comuna y del triunfo militar del Imperio alemán había inaugurado un período de reacción que dura hasta hoy día, en el momento en que Marx y sus amigos querían, mediante intrigas subterráneas, hacer de la acción de la Internacional obrera, creada por una lucha directa contra el capitalismo, un arma para la agitación parlamentaria en favor de los socialistas aburguesados, los “ex miembros” de la Internacional federalista de antes, inspirados por Bakunin, constituían la única defensa contra la reacción que invadía Eu­ropa.

Y a él le debemos, en gran parte, el hecho de que el espíritu revolucionario ha quedado vivo en los países latinos [7], ha en­contrado en las masas obreras de estos países una nueva fuerza viva para combatir la brusca evolución de la burguesía antes radical.

Y es en el seno de esas jóvenes fuerzas vivientes, desafiando los riesgos y los peligros, que declaró la guerra al viejo mundo, sin ningún apoyo de parte de los burgueses, en este medio se asentó por fin el comunismo anarquista moderno, con su ideal de igualdad económica y política y su negación audaz de toda explotación del hombre por el hombre.

Tales son los méritos de Bakunin ante la historia.

Piotr Kropotkin, junio de 1905 (traducido del ruso)


* El texto aparece bajo el título de «A guisa de prólogo» en un folleto en ruso de 1905 Sbornik statey M. Bakunina [Colección de artículos de M. Bakunin], 30 páginas, publicado por Jleb i Volia [Pan y Libertad], grupo anarquista ruso en exilio. Los textos de Bakunin son «La política de la Internacional, La organización de la Internacional, La Comuna de París y la noción del Estado, A propósito del congreso de la Haya». El formato (19/12,5) y la tipografía pequeña facilitaban el envío clandestino, dada la importancia de los eventos en Rusia. (N. del T.)


Notas:

[1] Confusión de Kropotkin, el libro fue escrito por Ross y James Guillaume, véase Bakounine oeuvres complètes Étatisme et anarchie, París, 1976, p. XXII. (N. del T.)

[2] Carta del 19 de julio de 1866 cuya parte más famosa es «Ya es tiempo de que yo presente un resumen: la propaganda de ustedes [en Rusia], no cabe duda, ni siquiera se beneficia, en la actualidad, de la décima parte de la influencia que tenía hace cuatro años. Los sonidos de vuestra Kolokol [«campana» en ruso, título de la revista de Herzen] se propagan y se pierden hoy en el desierto y el eco que encuentran es, digamos, casi nulo… Significa que la Campana tañe en el vacío y que no anuncia lo que hace falta. Les quedan dos salidas: parar o dar otra orientación. Les corresponde decidir. ¿Qué debería ser la orientación?» (N. del T.)

[3] Visarión Bielinsky, crítico literario y publicista ruso de gran talento, que ejerció una influencia decisiva tanto en su generación —la de Bakunin— como en las siguientes. (N. del T.)

[4] «Bakunin creía en la posibilidad de un levantamiento campesino armado en Rusia. Lo creíamos en parte y nosotros —incluso el mismo gobierno lo pensaba— como ocurrió a consecuencia de una serie de medidas, de artículos, de peticiones, de detenciones y de ejecuciones de condenas a muerte. La presión de la inteligencia, el ímpetu del espíritu era incontenible, y nadie preveía en aquel entonces que ello iba a terminar en un violento patriotismo. Bakunin, no insistiendo demasiado en todas las circunstancias posibles, apuntaba a una finalidad lejana y tomaba el segundo mes del embarazo por el noveno. Se dejó arrastrar no por los argumentos, sino por los deseos.» Herzen Alexander Biloe i Dumi [Pasado y palabras], parte seis, texto ruso en az.lib.ru/g/gercen_a_i/text_ (N. del T.).

[5] «Usted me engañó, y yo, sospechando o presintiendo instintivamente la superchería, me negaba consciente y sistemáticamente a creerlo […] pero ni este afecto ni este respeto podrían impedirme decirle francamente que su sistema de engaño, que tiende cada vez más a convertirse en su principal, su solo y único sistema, su arma y su método preferido, resulta funesto a la misma causa.» 
«Sí, estimado amigo, usted no es un materialista como nosotros, los pecadores, sino un idealista, un profeta. […] por su forma de pensar usted está más cerca […] de los jesuitas que de nosotros.» Bakounine oeuvres complètes relations avec Sergej Nechaiev 1870-1872, París, 1977, pp. 222, 225 (traducido del ruso). (N. del T.)

[6] «El nombre de 'Michel' se repetía sin cesar en sus charlas, no como el nombre de un jefe ausente cuyas opiniones marcarían la ley, sino como el de un amigo personal, del que cada uno hablaba con amor y con un espíritu de camaradería. Lo que me llamaba más la atención era que la influencia de Bakunin venía menos de su superioridad intelectual que de su personalidad moral.» París, 1971, p. 295. (N. del T.)

[7] Es evidente que la interpretación parte de un absurdo enfoque antialemán, más visible en Kropotkin que en Bakunin (N. del T.).

jueves, 29 de mayo de 2014

¡Todo poder condiciona, es despótico!


Por MIJAIL BAKUNIN

La sociedad moderna está de tal modo convencida de esta verdad: que todo poder político, cualquiera que sea su origen y su forma, tiende necesariamente al despotismo, que, en todos los países en que ha podido emanciparse un poco, se apresuró a someter los gobiernos, aun cuando hayan salido de la revolución y de la elección popular, a una vigilancia tan severa como sea posible. Ha puesto la salvación de la libertad en la organización real y seria de la vigilancia ejercida por la opinión y por la voluntad popular sobre los hombres investidos de la fuerza pública. En los países que gozan de gobierno representativo, y Suiza es uno de ellos, la libertad no puede ser real más que cuando es real la vigilancia. Al contrario, si la vigilancia es ficticia, la libertad popular se convierte necesariamente en una pura ficción.

[...]

Quien dice poder político, dice dominación; pero donde la dominación existe debe haber necesariamente una parte más o menos grande de la sociedad que es dominada, y los que son dominados detestan naturalmente a los que los dominan, mientras que los que dominan deben necesariamente reprimir y por consiguiente oprimir a los que están sometidos a su dominación. Tal es la eterna historia del poder político, desde que ha sido establecido en el mundo. Esto es lo que explica también por qué y cómo hombres que han sido los demócratas más rojos, los rebeldes más furibundos, cuando están en la masa de los gobernados, se convierten en conservadores excesivamente moderados cuando han llegado al Poder. Se atribuyen ordinariamente estas palinodias a la traición. Es un error; tienen por causa principal el cambio de perspectiva y de posición; y no olvidemos nunca que las posiciones y las necesidades que imponen son siempre más poderosas que el odio o la mala voluntad de los individuos.


miércoles, 28 de mayo de 2014

'Los dineros' de Bakunin

[El revolucionario Bakunin era humano, y como todo ser humano no era perfecto y tenía sus defectos. En toda su vida nunca dio un palo al agua, fue un mantenido. Aún así, fue un personaje histórico de gran relevancia para el movimiento obrero y una de las figuras teóricas más importantes del anarquismo. En el libro Policía secreta, secretos de policía del historiador belga Jacques de Launay (1989), en los párafos finales del Anexo titulado «Bakunin y la provocación policial», del capítulo tercero del libro, nos comenta esto (aunque me parece que se equivoca con alguna de las fechas y algún que otro dato más).]
También hemos orientado nuestra investigación hacia otro punto: el origen de los recursos de Bakunin. El hombre fue, probablemente, audaz y descuidado en materia de dinero. «Sablista» muy conocido, pidió prestado mucho y a menudo a los amigos, a veces unas cuantiosas sumas: 2.000 rublos a Herzen en 1840, cerca de 12.000 francos a la princesa Obolensky… Sus trabajos literarios eran muy irregulares y mal pagados. La familia le ayudó con regularidad: 225 rublos al mes en 1872, anota el policía Bertrand, que le vigiló en Locarno, el 22 de abril de 1872. Este policía hace constar que vivía holgadamente, en una lujosa villa, servido por dos criados. Aquel voluptuoso apacible se comportaba a la manera de un príncipe ruso, practicando el dolce far niente en uno de los más bellos lugares del mundo. En agosto de 1872, en La Chaux-de-Fonds, en el Congreso de la Alianza Internacional de la Democracia Socialista, estaba rodeado por cinco muchachas que nunca se separaban de él.

¿Quién pagaba todo aquello? El examen que hemos realizado nos permite asegurar que Bakunin fue financiado dos veces por las autoridades: en 1848, por Flocon, del gobierno provisional francés, para gastos de la revolución en Alemania; en 1870, por Roman, agente del III Buró ruso (policía) para gastos de una revuelta en Lyon. ¡Pero cómo encontrar esto a la vez en las cuentas de Bakunin, nunca ordenadas, y a veces ni siquiera anotadas, y en las acciones de la policía rusa, de la que en 1917 se descubrió que empleaba regularmente a 35.000 agentes exteriores!

Por consiguiente, el ejemplo de Bakunin no es significativo, por falta de rastros en lo que se refiere a esa cuestión de los recursos, pero decenas de otros líderes izquierdistas han sido manipulados y retribuidos indirecta e inocentemente por la policía o por los conservadores que trataban a la vez de ser informados de sus proyectos e iniciativas, de empujarlos a excesos por provocación y de servirse de ellos para luchar, mediante una demagogia utópica, contra la izquierda organizada y representativa de las corrientes sociales que ésta expresa.

JACQUES DE LAUNAY

La Baronata, villa situada en el cantón suizo de Locarno
donde vivió
Bakunin entre los años 1873-74.

Sobre la libertad

 

M. BAKUNIN

Yo soy un fanático amante de la libertad, que considero como el único medio con el cual se pueda desarrollar y engrandecer la inteligencia, la dignidad y la felicidad del hombre. Pero no aquella libertad —magnificada por la escuela de J.J. Rousseau…— que considera el sedicente derecho de todos, representado por el Estado, como el límite del derecho de cada uno, lo que nos lleva, siempre y necesariamente, a reducir el derecho de cada uno a cero. ¡No! Yo hablo de la única libertad que es digna de este nombre, de la libertad que consiste en el pleno desarrollo de todas las posibilidades materiales, intelectuales y morales que se hallan en estado de facultad latente en cada uno; de la libertad que no reconoce otras restricciones sino las que le son trazadas por las leyes de nuestra propia naturaleza, por lo que, hablando en propiedad, no hay restricciones ya que estas leyes no nos son impuestas de algún legislador fuera de nosotros, situado al lado o sobre nosotros; aquellas nos son inmanentes, inherentes, constituyen la base misma de todo nuestro ser… Yo hablo de aquella libertad de cada uno que, lejos de pararse como frente a un límite delante de la libertad del prójimo, encuentra en ella, al contrario, su confirmación y su extensión al infinito; de la libertad ilimitada de cada uno por la libertad de todos, de la libertad en la solidaridad, de la libertad en la igualdad, de la libertad triunfante sobre la fuerza bruta y sobre el principio de autoridad, que otra cosa no fue sino la expresión ideal de esta fuerza; de la libertad que, después de haber derrocado todos los ídolos celestiales y terrenales, fundará y organizará un mundo nuevo, el de la unidad solidaria, sobre las ruinas de todas las Iglesias y todos los Estados.

Soy un partidario convencido de la igualdad económica y social, porque sé que fuera de esta igualdad, la libertad, la justicia, la dignidad humana, la moralidad y el bienestar de los individuos, como la prosperidad de las naciones, no serán más que mentiras. Pienso que la igualdad debe establecerse en el mundo mediante la organización espontánea del trabajo y de la propiedad colectiva de las asociaciones productoras libremente organizadas y federadas en la comuna, no a través de la acción suprema y tutelar del Estado.

Es este el punto que divide principalmente los socialistas y colectivistas revolucionarios de los comunistas autoritarios, partidarios de la iniciativa absoluta del Estado. La finalidad es la misma: los dos partidos desean igualmente la creación de un nuevo orden social fundado únicamente sobre la organización del trabajo colectivo, inevitablemente a cada uno y a todos por la fuerza misma de las cosas, en condiciones económicas iguales para todos debido a la apropiación colectiva de los instrumentos de producción.

Solamente que los comunistas imaginan poder llegar a ello a través del desarrollo y la organización de la potencia política de las clases trabajadoras, principalmente del proletariado de la ciudad, y con la ayuda del radicalismo burgués; mientras que los socialistas revolucionarios, enemigos de todo ligamen y de toda alianza equívoca, piensan, por el contrario, que sólo pueden alcanzar este fin a través del desarrollo y la organización de las potencias no políticas sino sociales —y por consecuencia antipolíticas— de las masas trabajadoras, sea de la ciudad o del campo, incluidos a la vez todos los hombres de buena voluntad de las clases superiores que, rompiendo con su pasado, quieren unirse a ellos sinceramente y aceptar íntegramente su programa. De aquí, pues, los dos métodos diferentes. Los comunistas creen que deben organizar las fuerzas trabajadoras para adueñarse del poder político de los Estados. Los socialistas revolucionarios se organizan para destruir, o si se quiere una palabra más gentil, para liquidar los Estados. Los comunistas son partidarios del principio y de la práctica de la autoridad, los socialistas revolucionarios sólo tienen fe en la libertad. Los unos y los otros son igualmente partidarios de la ciencia que debe matar la superstición y sustituir la fe: pero los primeros quisieran imponerla, los otros se esfuerzan en propagarla de modo que los grupos humanos, convencidos, se organicen y se agrupen espontáneamente, libremente, de abajo arriba, por un movimiento íntimo y conforme a sus reales intereses, pero no según un plan ya trazado e impuesto a las masas ignorantes de alguna inteligencia superior. Los socialistas revolucionarios piensan que hay mucha más razón práctica y discernimiento en las aspiraciones instintivas y en las necesidades reales de las masas populares, que en la inteligencia profunda de todos aquellos doctores y tutores de la humanidad que con todas las tentativas frustradas para hacerla feliz, aún insisten en intervenir con sus esfuerzos… Los socialistas revolucionarios piensan que la humanidad se ha dejado gobernar demasiado tiempo, y que la fuente de sus desgracias no es ésta u otra forma de gobierno sino en el principio y en el hecho mismo de la existencia de un gobierno.

(Oeuvres. Tomo IV… Preambule pour la Seconde Livraison
de L’Empire Knouto-Germanique…
París, 1910).

lunes, 26 de mayo de 2014

Triste aniversario, muy triste

Hoy, al mediodía, hizo un año cuando la policía me llamó por el teléfono móvil para decirme una mala noticia. Llamada que supuso la peor de las noticias que he recibido en mi vida: la muerte de mi hermano Jesús.

En la madrugada de ese nefasto 26 de mayo del año 2013, Jesús salió de nuestra casa, ya que vivíamos juntos, y se fue a la casa de nuestra madre. Colocó sus objetos personales (gafas, teléfono móvil, DNI, llaves y sus zapatos) ordenados en un rincón, abrió una ventana que da a un tejadillo, salió descalzo hasta la cornisa para arrojarse al vacío desde un quinto piso a un patio interior. Todavía recuerdo, no se me borra de la mente, su cuerpo estrellado contra el frió suelo.

El día anterior estaba muy alterado, aunque con algunos momentos álgidos, como una especie de ‘montaña rusa’ emocional. Era sábado, justo el día que acababa el primer plazo de lo acordado con uno de sus jefes para cobrar dos meses de año anterior que le debían, pero no le pagaron nada. Se trastornó aún más.

Jesús trabajaba como administrativo para una empresa vallisoletana conocida del sector de la construcción. Empresa dedicada a la obra pública y la fabricación de conglomerantes. Empresa que llevaba con un ERE de más de un año (o aproximadamente dos, creo recordar) y tenía embargada cuentas corrientes y maquinaria. Empresa que no pagaba a sus trabajadores desde meses atrás, y que varios de ellos habían denunciado. Jesús era uno de ellos. En el mes de abril anterior estuvo viendo a dos abogados, y optó por el mismo que el resto de sus compañeros, para denunciar también su situación laboral. El 3 de mayo, como primer paso, en un Acta de Conciliación acordó uno de sus jefes que le pagarían dos meses del año 2013 antes del 25 de mayo y el resto antes del 30 de junio. Pero, no fue verdad, no se le pagó nada. (Eso sí, a mediados del mes de junio siguiente, fuera de plazo, sus jefes ingresaron tres meses en su número de cuenta, pero él ya estaba muerto.)

También les pedía la rescisión del contrato por impago de nóminas, pero la empresa se opuso y no dio ninguna explicación. Después en la calle, el jefe le dijo que podrían tener trabajo para el año 2015, pero que no contaría con él, y que le llamarían unos días más tarde. Estaba preocupado por ello, no sabía para qué le iban a llamar; además, se sentía en ‘tierra de nadie’, no estaba en el paro, pero cobraba el subsidio de desempleo; seguía contratado, pero no cobraba salario alguno, se veía desamparado. Si añadimos que en ese funesto mes de mayo tampoco cobró el paro, porque su empresa no envió a tiempo el papeleo necesario. Consideró que podría ser algún tipo de represalia y su estado anímico fue empeorando.

Aunque ya no estaba bien desde tiempo atrás, su futuro laboral lo veía muy negro. La crisis económica que padecemos y su situación laboral le tenían muy preocupado. Después de esa Acta de Conciliación, del que esperaba algo y la negativa actitud de sus jefes, la cosa se agravó y lo sentenció. Lo digo yo que le conozco desde nacimiento, ya que somos mellizos, digan lo que digan otros. Y cómo suele pasar en este mundo, nadie se hace responsable. Nadie es responsable de la crisis financiera, resultado de la especulación de años anteriores, que ha llevado al desahucio e, incluso, la muerte a muchos inocentes. Nadie se hace responsable de la inexistencia de unos medios de protección social, de actuación ante los efectos de una crisis y la absoluta falta de previsión cuando este país iba bien. Víctimas, muchas, y siempre los más débiles, pero los que tienen la culpa no responden, siguen impunes. ¿Qué voy a exigir a los jefes de mi hermano? Ellos tampoco se hacen responsables.

A finales de septiembre del año pasado, tuvimos el juicio contra la empresa, y lo perdimos. Quedó archivado. La exigida rescisión de contrato no se puede llevar a cabo, ya que tras el suicidio de mi hermano, finalizó el contrato. Y para exigir la susodicha rescisión, es necesario que el contrato este vigente, y con su muerte queda anulado. Y las nóminas impagadas tienen que exigirlas de nuevo sus herederos, ya que no hizo ningún testamento, en este caso nuestra madre viuda, dependiente y con un grado de discapacidad reconocido del 34 por ciento. ¡Otra vez a empezar!

El pasado mes de noviembre, a mediados, tuvo lugar un nuevo Acta de Conciliación, ya que el abogado tiene poderes generales por parte nuestra, no fue necesario la presencia de mi madre, tuvo que vérselas con el abogado de la empresa. Y no llegaron a ningún acuerdo. El abogado de la empresa no aceptaba nada de lo que se le pedía. Para el próximo 26 de enero del próximo año 2015 tenemos otro juicio contra estos caciques.

Por mi parte quiero responsabilizarles de su muerte, aunque lo sean indirectamente, pero lo tengo muy difícil. Tengo que probarlo, demostrar que hay una vinculación entre su situación laboral y su muerte y el grado de responsabilidad que puedan tener. Mi testimonio y el de familiares y amistades no es suficiente. Tengo que presentar algún informe pericial de un médico o un psicólogo, y no lo tengo (como mucho la declaración de nuestra médica de cabecera, ya jubilada, que me aconsejaba que Jesús tenían que ser visto por algún terapeuta, pero él no quería). Unos desconocidos con título académico son más creíbles ante un tribunal que aquellos que conocíamos directamente al fallecido. Cuando muchos sabíamos que Jesús estaba muy afectado por su estado laboral y no tenía otros problemas graves, pero esto no cuenta. ¡Así es el sistema!

En unos mensajes dirigidos a un amigo nuestro, uno de los jefes de Jesús le decía que su empresa ha dado de comer a muchas familias durante años, que mi hermano tenía otros problemas y que ellos eran los únicos que le echaban de menos. Y eso no es así… Mientras sus trabajadores se ganaban el pan con su esfuerzo, ellos se enriquecían más. El único problema serio que mi hermano tenía era esa empresa que no le pagaba lo suyo (no digo su nombre, por evitar disgustos). Y si tanto le ‘echan de menos’, ¿por qué le insultan incumpliendo lo acordado? ¿O, también, a mi madre al negarse a pagar? Seguro que el abogado les sale más caro, para él sí que hay dinero. (Aunque, a principios de este año, por orden judicial, se les ha podido arrancar algo de dinero.) Cuando las cosas van mal se olvidan de aquellos que les han enriquecido, por conservar y guardar sus mezquinos intereses. ¡Pagad lo que debéis a vuestros trabajadores, y luego volved a empezar, ya que tan emprendedores os creéis!

EL HERMANO


domingo, 25 de mayo de 2014

Líder de la falsa revolución en Libia admite que Gadafi no asesinó manifestantes


24 mayo 2014

La llamada Revolución Libia fue de falsa bandera. El pueblo libio, en su gran mayoría estaba contento y seguro.

Mustafa Abdul Jalil, líder del Consejo Nacional de Transición de Bengasi en 2011 admite: «Gadafi no ordenó el tiroteo que comenzó la falsa revolución de Libia.» Ahora, después de la destrucción de Libia, Jalil admite al mundo en el Channel One de Libia que los manifestantes que fueron asesinados en Bengasi —lo que 'provocó' que la UE y la OTAN atacaran Libia—, fueron asesinados por un grupo de espías y mercenarios que no eran libios. Admite que sabía la verdad en ese momento, pero que se hizo para quitar al Gobierno libio y romper el Estado.

Admite que fue informado con antelación de que esto iba a suceder y que la gente de Libia no reconocía a los manifestantes muertos porque llevaban ropa de civiles y nadie fue a sus entierros ya que no tenían ningún amigo ni familiares en Libia.

Como venimos diciendo desde febrero de 2011, la llamada Revolución Libia fue de falsa bandera. El pueblo libio, en su gran mayoría estaba contento y «seguro». Los grupos extremistas islámicos eran ilegales en Libia. Ahora Libia está controlada por grupos extremistas islámicos (Al Qaeda, Libyan Islamic Fighting Group (LIFG), Hermanos Musulmanes, Ansar, Al Sharia y otros).

El país está roto, no hay seguridad, miles han sido encarcelados ilegalmente y cientos han sido torturados hasta la muerte. No hay gobierno, no hay ventas de petróleo, 2 millones siguen en el exilio. Psicópatas se han hecho con el país y ahora es considerado tierra de nadie —sin fronteras y sin Gobierno.

Así que gracias, Obama, CIA, Hilary Clinton, OTAN y UE por NO proteger a los civiles inocentes en Libia.

'Mami decide todo en Europa': ¿Para qué unas elecciones si Merkel es la que manda?


Los resultados de las presentes elecciones europeas serán poco o nada significativos, ya que al final todo lo soluciona Angela Merkel, escribe el diario alemán Die Welt en un artículo titulado «De todos modos, mamá decide todo en Europa».

Este domingo los ciudadanos europeos terminarán de participar en las elecciones, desarrolladas entre el 22 y 25 de mayo, donde se eligen a los 751 diputados del Parlamento Europeo. Los votantes españoles, por ejemplo, acuden este domingo a las urnas para elegir a 54 eurodiputados de su país. Se espera que los resultados finales se anuncien la noche del domingo.

El nuevo Parlamento Europeo estará representado por cerca de 200 partidos nacionales que se unirán en siete grupos o 'familias de partidos' para nombrar al jefe de la Comisión Europea. Se estima que el conservador luxemburgués Jean-Claude Juncker y el socialista alemán Martin Schulz son los candidatos con más posibilidades de sustituir al actual presidente, José Manuel Durão Barroso.

Sin embargo, esta última palabra —según el influyente periódico alemán Die Welt— no será ni del Parlamento ni del Consejo de Europa, ya que las decisiones tradicionalmente le «pertenecen a Angela Merkel». El diario ironiza que no queda claro por qué no se simplificó el procedimiento de las elecciones si era posible preguntar de inmediato a «mamá», como apodó el diario a la canciller alemana Angela Merkel, «que es quien en todos los grandes asuntos europeos tiene la última palabra».

Die Welt advierte que la gran cantidad de partidos políticos y la baja participación electoral esperada podrían hacer que el Parlamento Europeo sea un cuerpo incapacitado e ilegítimo. «Para los políticos es importante que las personas vayan a votar. Todo lo demás será resuelto por los propios políticos», concluye el diario.

sábado, 24 de mayo de 2014

Europa, una fábrica de pobreza (y con España en un papel destacado)


Entre 2009 y 2012, la Unión Europea sumó 9 millones de ciudadanos en riesgo de pobreza o exclusión cuando el objetivo para 2020 era restar 20 millones. España ha incrementado esta tasa de un 24,5% al 28,2% y está por encima de la media continental del 24,8%. Alemania, Países Bajos o Suecia han aprovechado este lapso temporal para reducir sus porcentajes.

22/05/2014

En Europa, cada vez más personas están en riesgo de caer en la pobreza o la exclusión social. Y, además, España supera la media de población amenazada por este peligro.

El Consejo Europeo adoptó en 2010 la autodenominada Estrategia Europa 2020. Para ese año, según el documento «debería haber 20 millones de personas menos en riesgo de pobreza o exclusión social». Los datos de Eurostat indican que, al menos desde 2009, lejos de restar, se han sumado más de nueve millones. En 2012 había un 24,8% de europeos en esa situación. Suman 124,2 millones de personas. Un año antes, la tasa estaba en el 24,3% y 119 millones de personas. En 2009 el porcentaje se quedaba en el 23,1%. La secuencia siempre va en ascenso, ya que entonces Eurostat le atribuía 115 millones de habitantes.

España está contribuyendo con fuerza a lastrar el objetivo de la Unión. En este baremo de desigualdad saca casi cuatro puntos de ventaja a la media. La tasa estatal está en el 28,2%. El ritmo de crecimiento de la porción de ciudadanos asomados al abismo de la exclusión ha llevado a España del 24,5% en 2009 al 28,2% tres años después (en 2010 era 26,7% y en 2011 27,7%). Mientras la Unión Europea le ha añadido de media 1,7 puntos al indicador, aquí se le han colocado casi cinco. En lo que respecta a los niños y niñas, el porcentaje europeo medio es de un 28%. En ese apartado España también se hunde más: para el grupo de hasta 16 años la tasa de pobreza llega al 33,8%.

Esas cifras resaltan sobre todo en comparación con los países vecinos. Francia, por ejemplo, se maneja con una tasa general del 19,1% y del 23,2% para los niños. Su incremento de población en condiciones desfavorables ha pasado del 18,5% al 19,1% en tres años. Portugal convive con un 25,3% de pobreza (27,8% para niños) cuando en 2009 era del 24,9%. Los Estados con cifras más bajas son la República Checa, que ha evolucionado del 14 al 15,4% o Austria: del 17 al 18,5%.

En el grupo que se sitúa por encima de la media continental de riesgo de exclusión acompañan a España Italia, Bulgaria, Grecia, Croacia, Polonia, Rumanía, Hungría… El país paradigmático de la política europea ante la crisis, Grecia, ha visto su población en el umbral de la exclusión pasar del 27,6% al 34,6%.


Reparto desigual de los sacrificios

Pero es que, en medio de la coyuntura de crisis, no todos los estados han sufrido los recortes sociales que venían desde Europa de igual manera. Ni todos los países de la UE han aumentado sus tasas de ciudadanos en riesgo. Los Países Bajos tenían un porcentaje de población en riesgo del 15,1% en 2009 y la han rebajado hasta el 15. Alemania descendió del 20% al 19,6%. Suecia varía del 15,9% al 15,7%. La Unión Europea establece que este riesgo afecta a la población que reúna uno de estos criterios: estar por debajo del umbral de pobreza, en situación de privación severa material o viviendo en un hogar con muy baja intensidad laboral.

El 22% de españoles tienen ingresos por debajo del umbral de la pobreza del país. Es uno de los porcentajes más altos de la Unión Europea —cuya media es 17%— sólo por detrás de Grecia y Rumanía. Cuando en marzo la asociación católica Cáritas dio una voz de alarma sobre la pobreza en Europa y España, la respuesta llegó desde el Ministerio de Hacienda. Su titular, Cristóbal Montoro, aprovechó una comparecencia tras el Consejo de Ministros para asegurar que estos enfoques «no se corresponden con la realidad».

La Oficina Estadística Europea reconoce que la media continental de exclusión «enmascara grandes disparidades. Bulgaria roza el 50% y Grecia llega al 34%». La peor parte se llevan los menores de 16 años, cuya media de exclusión está en el 28%. Le siguen los adultos hasta 64 con un 25,3%. Los mayores presentan una tasa del 19,3%.

viernes, 23 de mayo de 2014

Dibújame las desigualdades, Milanovic

 

Un gráfico sobre las desigualdades de Milanovic

EMMANUEL LEVY*

La mundialización puesta en marcha desde finales de los años 80 y la conversión de China al capitalismo ha remodelado en buena medida la distribución de los ingresos. Branko Milanovic, [antiguo] economista jefe del Banco Mundial ha trasladado a un gráfico los efectos de 20 años de esta globalización. Dibuja una especie de elefante. ¿Y adivinan qué? Para las clases medias de los países desarrollados, el paquidermo de la mundialización se ha sentado sobre sus ingresos.

El eje vertical indica la evolución de los ingresos reales entre 1988 y 2008, expresada en dólares internacionales de 2005 con la corrección correspondiente a la inflación.

En el eje horizontal, se pueden leer los niveles de ingresos en el mundo, de manera que al principio, hacia el cero, se encuentran los que menos ganan del mundo, y en el extremo derecho, los que más ganan. Se tiene así pues una redistribución de la población independientemente de los países en que reside.

En el extremo derecho de la curva se encuentran los grandes ganadores. Esta nueva superclase global ha visto progresar sus ingresos en más de un 60%. Ahí se encuentra el 3% más rico de los países desarrollados. Francia, Japón y un grueso batallón de norteamericanos, cuyo país ha entrado en el mercado de la desigualdad entre los primeros (la mitad de esta superclase). El resto se recluta entre el 1% superior de los países emergentes, los BRIC: Brasil, Rusia, India, China y África del Sur. Los otros que salen ganando, la gran espalda del elefante, son las numerosas clases de los BRICS. Esta nueva clase media mundial. En 1988, el asalariado medio de China, centenares de millones de chinos, se clasificaba entre el 10% de los menos ricos de la población mundial. Veinte años más tarde, ese mismo asalariado se clasificaba más allá del 50%.

Los que salen perdiendo se dividen entre dos poblaciones.

EVOLUCIÓN DE LOS INGRESOS REALES ENTRE 1988 Y 2008
EN FUNCIÓN DEL NIVEL DE INGRESOS

En el extremo izquierdo de la curva: los más pobres, los abandonados a su suerte por la globalización.

El otro grupo se encuentra en el percentil 80, lo que el profesor Branko Milanovic designa como «una clase media superior mundial». Por último, una antigua clase dominante, puesto que la mundialización ha llevado a un retroceso de sus ingresos relativamente respecto a los demás. ¿Quién compone esta población? Los grandes batallones de asalariados de los países de la OCDE y los antiguos países del bloque comunista, tocados por el desempleo masivo, la ausencia de crecimiento; hijos de las políticas de librecambio.

18/5/2014


  * Emmanuel Levy es periodista, especializado en economía, del semanario francés Marianne.

jueves, 22 de mayo de 2014

El oligarca más rico de Ucrania se alza contra los rebeldes prorrusos


Rinat Ajmétov, propietario del mayor conglomerado industrial de Donetsk, inicia un movimiento de protesta contra los insurgentes de la región oriental

20 mayo 2014

El oligarca más rico de Ucrania, Rinat Ajmétov, propietario del mayor conglomerado industrial de la rebelde Donetsk (Metinvest), ha iniciado este martes un movimiento de protesta contra los líderes insurgentes de la república popular independiente autoproclamada en la región.

Una «sirena de la paz» ha sonado a mediodía en todas las fábricas de Metinvest emplazadas en la región en una iniciativa llamada «Donbass [zona hullera] sin armas», convocada la víspera por el multimillonario natural de la región rebelde.

Al mismo tiempo, varios centenares de seguidores del club de fútbol Shakhtar Donetsk, también propiedad de Ajmétov, han acudido al estadio Donbass Arena para tomar parte en otra acción denominada «la Marcha de la Paz», cuya celebración se ha limitado al campo y que ha durado poco más de 20 minutos.

Una columna de coches, muchos adornados con símbolos estatales de Ucrania, ha recorrido varias veces la calle principal de la ciudad a toque de claxon para solidarizarse con la iniciativa del empresario.

Cada mediodía

La sirena sonará todos los días a mediodía en todo el Donbass, ha dicho Ajmétov, que ha acusado a las milicias populares de poner en peligro con sus acciones la economía y los puestos de trabajo en la región.

«Nadie puede atemorizarnos, incluidos los que se llaman república popular de Donetsk. ¿Qué han hecho para nuestra tierra, qué puestos de trabajo han creado? ¿Andar con fusiles por las ciudades del Donbass es acaso defender los derechos de la gente frente al poder central?», ha manifestado el oligarca.

Pillaje y secuestros

Ajmétov ha acusado a los milicianos de «pillaje y secuestro de ciudadanos pacíficos» y ha tachado sus acciones de «genocidio del Donbass» y «lucha contra los habitantes» de esa región.

El ministro de Interior ucraniano, Arsén Avákov, ha felicitado a Ajmétov por mostrar, «por fin, energía» para poner punto y final a la rebelión prorrusa que vive desde hace más de un mes esa región y también la vecina Lugansk, proclamadas independientes de Ucrania por sus líderes insurgentes.

«Le creo. Espero que el Donbass también le crea. Si hay un deseo genuino, resolveremos las diferencias y apartaremos a un lado los fusiles», ha escrito el ministro en su página de Facebook.

Amenaza de los prorrusos

El líder del autoproclamado Parlamento de la república popular de Donetsk, Dennís Pushilin, ha respondido al empresario con la amenaza de «nacionalizar» sus empresas.

«Se ha tomado la decisión de nacionalizar» las empresas de los «oligarcas regionales que no quieren pagar impuestos a la república popular de Donetsk», ha escrito Pushilin en su cuenta de Twitter en alusión a Ajmétov, al que ha acusado de «financiar el terror en el Donbass al pagar impuestos a Kiev».

miércoles, 21 de mayo de 2014

Las algas del mar Báltico conservan elementos radiactivos de Chernóbil


Investigadores del Centro Nacional de Aceleradores en Sevilla y otros 30 centros internacionales han confirmado que los niveles elevados de plutonio y yodo radiactivo que presentan las algas del mar Báltico se deben al impacto del accidente de Chernóbil en 1986, así como a las descargas de radionucleidos procedentes de la planta de reprocesamiento de Sellafield, en Reino Unido. El estudio forma parte de procesos de certificación para la Organización Internacional de la Energía Atómica.

20 mayo 2014

El Centro Nacional de Aceleradores (CNA, Universidad de Sevilla-Junta de Andalucía-CSIC), en Sevilla, colabora con el laboratorio de medio ambiente marino de la Organización Internacional de la Energía Atómica (IAEA), en Mónaco. Este laboratorio distribuye muestras afectadas por diversas fuentes de contaminación radiactiva entre diferentes centros para que estudien la presencia de radionucleidos mediante técnicas radiométricas o de espectrometría de masas.

En este contexto, un trabajo desarrollado por los miembros del grupo de Espectrometría de Masas con Aceleradores del CNA ha analizado los niveles de plutonio Pu-239 y Pu-240 y yodo I-129 en algas procedentes del mar Báltico. Los investigadores han confirmado los niveles elevados de radionucleidos antropogénicos debidos al impacto del accidente de Chernóbil en 1986 y las descargas de radionucleidos desde la planta de reprocesamiento de Sellafield (Reino Unido).

De este modo se ha obtenido un estudio estadístico de los resultados, estableciendo valores de referencia para las algas. Los resultados se han publicado en la revista Applied Radiation and Isotopes en un estudio en el que han participado otras 30 instituciones de España y otros países.

La determinación exacta y precisa de las concentraciones de radionucleidos en muestras marinas es importante para las evaluaciones de radiactividad marina y para el estudio de procesos oceanográficos.

En los próximos meses se abordará el estudio de sedimentos procedentes del atolón Bikini, en el océano Pacífico, donde Estados Unidos llevó a cabo entre 1950 y 1963 la mayoría de sus pruebas termonucleares. Se incluirá la determinación de U-236, isótopo de uranio de origen esencialmente antropogénico de gran interés en estudios oceanográficos.

Los resultados obtenidos permiten certificar los distintos materiales empleados para diversos radioisótopos y que posteriormente serán empleados para controles de calidad que validan los métodos empleados en su medida. Según indica la doctora Elena Chamizo Calvo, «en el CNA analizamos diferentes muestras proporcionadas por la IAEA que se encuentran en proceso de certificación».

La IAEA es la organización internacional de cooperación en el campo de la energía nuclear. Fue creada en 1957 dentro de la Organización de las Naciones Unidas. La agencia trabaja con sus estados miembros y socios en todo el mundo para promover tecnologías nucleares seguras y pacíficas.

Este organismo internacional se ha encargado del control de eventos tales como los accidentes nucleares de Chernobyl y Fukushima, siendo sus objetivos que la energía nuclear no se utilice con fines militares y establecer normas de seguridad nuclear y protección ambiental.


  Referencia bibliográfica:
  M.K. Pham, M. Benmansour, F.P. Carvalho, E. Chamizo, D. Degering, C. Engeler, C. Gascó, J.P. Gwynn, A.V. Harms, E. Hrnecek, F.L. Ibanez, C. Ilchmann, T. Ikaheimonen, G. Kanischm, M. Kloster, M. Llaurado, A. Mauring, B. MØller, T. Morimoto, S.P. Nielsen, H. Nies, L.D.R. Norrlid, H.B.L. Pettersson, P.P. Povinec, U. Rieth, C. Samuelsson, J. Schikowski, B.V. Šilobritiene, P.A. Smedley, M. Suplinska, V.P. Vartti, E. Vasileva, J. Wong, T. Zalewska, W. Zhou. «Certified Reference Material IAEA-446 for radionuclides in Baltic Sea seaweed». Applied Radiation and Isotopes (2013). http://dx.doi.org/10.1016/j.apradiso.2013.11.013

martes, 20 de mayo de 2014

Un hospital público de Atenas se niega a operar a un desempleado porque no tenía seguro


Un grupo de médicos denuncia al Gobierno de Samarás ante el Tribunal Penal Internacional

18/05/2014

Un hombre de 54 años, aquejado de una grave enfermedad coronaria, ingresó la semana pasada en el hospital Evangelismós de Atenas. Necesitaba ser operado. Lo bajaron al quirófano, lo sedaron e intubaron. También le afeitaron el pecho. Cuando el cirujano tenía el bisturí en la manó, entró corriendo el gerente. El enfermo, casado y con un hijo, era un desempleado sin cobertura sanitaria de ningún tipo. La operación costaba 15.000 euros y no podía pagarla. El gerente ordenó al equipo médico que lo reanimaran y le dieran el alta.

El doctor Tasos Vijas, de la clínica social Kinonikó Iatrio, conoció el caso el pasado martes y llamó a la prensa. Se armó tanto revuelo que al día siguiente el gerente de Evangelismós telefoneó al paciente. Ya podía operarse. Todo había sido un malentendido. El Ministerio de Sanidad explicó que el enfermo había acudido a operarse el día que no le tocaba. Sólo eso.

Vijas no se lo cree y ha denunciado al Gobierno. Asegura que actuó con premeditación, como muchas otras veces. «Tenemos cientos de casos», asegura. «Hemos ido a los tribunales, incluido el Penal Internacional de La Haya. Creo que los que tienen el poder y han impuesto las condiciones de la deuda han de ser juzgados por crímenes contra el pueblo griego».

Las Naciones Unidas han criticado con dureza al Gobierno conservador de Antonis Samarás por no atender las necesidades básicas de la población, y a los acreedores les ha pedido que rebajen la presión porque provoca la muerte de muchas personas. Grecia ha reducido un 25% el presupuesto de los hospitales y es el país de la Unión Europea anterior al 2004 que gasta menos en sanidad.

La mortalidad infantil, según The Lancet, ha subido un 43%, las depresiones severas se han multiplicado por 2,5, los casos de tuberculosis entre los drogodependientes se han doblado, los contagiados con el VIH se han multiplicado por diez y los suicidios han crecido un 45%.

Hay 800.000 personas, en una población de 11 millones de habitantes, que no tiene ningún tipo de seguro médico porque han agotado el paro y otras prestaciones. El doctor Vijas asegura que son el 30% y que muchos más no pueden asumir el copago de las visitas y de los medicamentos. «Hay diabéticos sin acceso a insulina que infartan —explica Tasos Vijas—, enfermos con la presión alta que no pueden medicarse y que también sufren infartos cerebrales».

La clínica social está en el barrio de Elenikó, última parada de la línea 2 del metro. Es un proyecto de 300 médicos voluntarios que, en dos años y medio, han hecho más de 26.000 visitas. Cubren todas las especialidades y ofrecen medicinas gratis que reciben de donaciones. Las visitas al psicólogo y al psiquiatra se han disparado después de que el Estado redujera un 55% el gasto en enfermedades mentales.

El doctor Vijas muestra la imagen de un tumor de pecho tan grande que ha eclosionado sobre la piel: «Siete meses anduvo esta mujer de hospital en hospital sin que la atendieran hasta que vino a nosotros. Hoy agoniza y cuando muera será un asesinato. Tenemos cientos de casos».

lunes, 19 de mayo de 2014

Por un puñado de cargos

«¡Un cargo o tu vida!»,
viñeta del asesino del presidente Garfield.

 La locura del asesinato en León podría movernos a pensar en sanas y racionales reformas

17/05/2014

Érase una vez una persona que disparó por la espalda a su presidente, causándole la muerte. ¿El motivo? Que el presidente le había denegado un cargo de confianza política. La trágica muerte del presidente fue la gota que colmó el vaso de la insatisfacción popular con una administración pública donde demasiados puestos dependían de quién ganaba las elecciones: hasta aquí hemos llegado, no podemos tolerar tanta arbitrariedad política en los nombramientos y que todo aquel que aspire a una carrera en el sector público trate de granjearse, por el procedimiento que sea, la protección de un padrino.

Dos años después, el congreso de ese país aprobaba una reforma que despolitizaba la administración. Una reforma que, hay que subrayarlo, había sido debatida en el congreso con anterioridad en innumerables ocasiones, pero que sólo entonces pudo vencer la resistencia de un establishment político que hasta entonces había disfrutado de un poder enorme para hacer y deshacer en la administración. Cuando el pueblo vio los disparatados efectos perversos de la politización, exigió el cambio hacia un modelo de administración más profesionalizado. Y los políticos no tuvieron más remedio que aceptar que les ataran las manos en la gestión de la administración.

¿Estoy haciendo un ejercicio de política ficción sobre lo que podría pasar en España después de la trágica muerte de la presidenta de la Diputación de León, Isabel Carrasco? No, estoy relatando un hecho real ocurrido en EEUU hace más de un siglo. Su vigésimo Presidente, James Garfield, fue asesinado en el verano de 1881 por Charles Guiteau, quien, frustrado porque el presidente no le había agraciado con un cargo público, le disparó en una estación de Washington. Guiteau se convertió así en el paradigma del «enchufado desengañado» (disappointed office-seeker). Queda fuera de duda que Guiteau estaba desequilibrado, pero el crimen propició un debate nacional sobre la organización de la administración. Mientras el presidente agonizaba, los reformistas americanos crearon la Liga Nacional para la Reforma de la Función Pública (National Civil Service Reform League) e iniciaron una campaña de concienciación pública a gran escala. Sólo en el estado de Nueva York llegaron a distribuir medio millón de panfletos a favor de una administración realmente meritocrática y despolitizada. Sus esfuerzos culminaron en 1883 con la aprobación de la icónica (en el mundo de los nerds de la administración pública, hay que añadir…) Pendleton Act.

Antes de esta ley, para mantener sus puestos o para ascender, un gran número de empleados públicos americanos debían ser leales al «patrón» político que los había nombrado. No sólo la eficiencia organizativa se resentía —y la corrupción se encubría si afectaba a nuestro santo jefe— sino que el servidor público vivía una situación de inestabilidad e histeria. Como famosamente dijo el senador Charles Sumner, EEUU vivía dos fiebres: aquellos que iban a California en busca de oro y aquellos que iban a Washington en busca de un enchufe.

A partir de la Pendleton Act, el funcionamiento de la administración americana cambió radicalmente. Hoy día sigue habiendo muchos nombramientos políticos en EEUU, pero, y aquí es donde reside la clave, las carreras de empleados públicos y políticos están básicamente separadas. Vamos, que no necesitas el carnet de un partido para hacer una carrera dentro de la administración. Puedes colmar tus ambiciones profesionales dentro de la administración sin necesidad de alinearte políticamente con Demócratas o Republicanos.

Esta situación contrasta con lo que ocurre, 130 años después, en muchas de nuestras administraciones públicas. Como hemos sabido estos días tras el asesinato de Isabel Carrasco, presidenta de la diputación de León, las carreras administrativas y políticas parece que andan demasiado entrelazadas en España. En su crónica de El País, Luis Gómez observa cómo tanto la entrada —«Montserrat Triana entró en la Diputación por recomendación»— como la salida de la Diputación estaban muy politizadas: «caer en desgracia en León dependía de "La Carrasco". No había medias tintas». Luis Gómez relata que el caso de Montserrat Triana no es único, sino que se suma a otros, como el de las oposiciones para auxiliares de la Diputación de León, «donde se descubrió que la mayoría de los 40 agraciados no solo eran familiares de altos cargos o directamente afiliados del PP local, sino que habían conseguido una cantidad inaudita de sobresalientes en sus calificaciones».

El subtítulo de la crónica de Luis Gómez es, de hecho, una síntesis sucinta de la patología central de nuestras administraciones: «Montserrat Triana quiso hacer carrera profesional y política bajo el paraguas de Carrasco». Las carreras profesionales y políticas van unidas y, además, se hacen bajo el «paraguas» de alguien. Unos años antes, Isabel Carrasco también había tenido su «padrino» tal y como relata José A. Otero para eldiario.es. Un paraguas es protegido por otro paraguas que, a su vez, es protegido por otro.

Por tanto, el luctuoso asesinato de Isabel Carrasco, aún siendo el resultado de una locura monstruosa, destapa el modus operandi en muchas administraciones españolas. Las carreras profesionales y políticas no están lo suficientemente separadas. De hecho, en algunos casos están todavía decimonónicamente integradas. Ciertamente, existe una meritocracia formal en nuestras administraciones que, en muchos casos, se traduce en una meritocracia de facto. Sin embargo, en demasiados casos —y no sólo, aunque posiblemente con más frecuencia, en las Diputaciones provinciales— junto la estructura meritocrática formal coexiste con una politización informal en el que las lealtades personales al superior político cuentan más que los méritos profesionales.

Nuestro deber es denunciarlo. Debemos dejar claro que esta politización no es algo universal. No ocurre en los países occidentales que queremos emular. Y no es una práctica exclusiva de determinados partidos o de las personalidades excéntricas de determinados políticos. Es una debilidad intrínseca de nuestras instituciones. Carecemos de cortafuegos institucionales que separen el mundo de la política del de la administración. Hay demasiados contactos, demasiadas dependencias políticas que acaban deviniendo dependencias personales.

Víctor Lapuente Giné