miércoles, 15 de octubre de 2014

Lo que muestra la epidemia de ébola


Margaret Chan remarcó que el actual brote pone en evidencia que el mundo «está mal preparado» para una emergencia sanitaria severa. La enfermera que se contagió en Estados Unidos está «clínicamente estable». Y en Madrid, la otra paciente experimenta una mejoría.

Por Pedro Lipcovich

«La epidemia de ébola muestra que el mundo está mal preparado para responder a cualquier emergencia sanitaria severa», dijo la directora general de la Organización Mundial de la Salud (OMS); señaló que la crisis «muestra los peligros de las crecientes desigualdades: a los pobres se los deja morir», pero «cuando el virus que los mata queda fuera de control, el mundo entero está en riesgo». Un experto argentino comparó el ébola con la enfermedad de Chagas, en cuanto a «la falta de desarrollo de medicamentos para enfermedades de zonas pobres». Gran Bretaña empieza hoy a controlar sanitariamente a viajeros procedentes de la zona afectada, aunque las autoridades reconocieron que el chequeo no podrá abarcar a todos porque muchos pueden llegar por vías indirectas. La Unión Europea y Estados Unidos también evalúan el control en aeropuertos. Entretanto, la enfermera que se contagió en España muestra signos de evolución «positiva», y la enfermera contagiada en Estados Unidos se halla «clínicamente estable».

Margaret Chan, titular de la OMS, señaló que «ya en 2009, con la pandemia de gripe H1N1, constatamos que el mundo no estaba preparado para dar una respuesta adecuada. La actual epidemia de ébola lo demuestra sin lugar a dudas», y agregó que la epidemia «muestra los peligros de las crecientes desigualdades sociales y económicas en el mundo: a los pobres se los deja morir, pero, cuando un virus mortífero queda fuera de control, el mundo entero está en riesgo». Chan recordó que, aunque el virus surgió hace casi 40 años, «no existen tratamientos ni vacunas, y esto se debe a que, como la enfermedad se limitaba a países pobres, no hubo incentivos para investigación y desarrollo. Una industria que se mueve por la búsqueda de beneficios no investiga en productos para mercados que no puedan pagar». Chan consideró que el ébola es «la mayor emergencia sanitaria de los últimos años, por encima de la pandemia de gripe H1N1».

Tomás Orduna, jefe de medicina tropical y medicina del viajero del Hospital Muñiz, comentó que, en cambio, «el VIH, también originado en Africa, se hizo presente en el primer mundo y eso generó una respuesta que no hubiera tenido de haber sido una más de las enfermedades de zonas pobres. Por ejemplo, hay más de 30 fármacos para el VIH y sólo dos para la enfermedad de Chagas. Hubo 22 brotes de ébola antes del actual, y la única respuesta estuvo dada por actos heroicos de trabajadores de la salud de organizaciones como Médicos Sin Fronteras, la Cruz Roja y la OMS».

De todos modos, en cuanto al ébola, «hoy estamos mejor que hace 30 días —estimó Orduna—: se ha producido, aunque moderada, una respuesta internacional, con la llegada de trabajadores de la salud cubanos y ahora también chinos; los canadienses instalaron una base y las tropas norteamericanas construyen hospitales de campaña».

Desde hoy, en el aeropuerto de Heathrow, Londres, a los pasajeros que llegan desde los países afectados por el ébola (Liberia, Sierra Leona y Guinea) se les toma la temperatura y se les administra un cuestionario sobre su salud y posibles contactos con enfermos. El control no podría alcanzar a más del 90 por ciento de los viajeros, ya que muchos no llegan en forma directa. Pasado mañana, en Bruselas, los ministros de Salud de la Unión Europea procurarán coordinar las decisiones sobre aeropuertos. En Estados Unidos, Barack Obama se reunió ayer con altos funcionarios para analizar la situación.

La enfermera que enfermó de ébola en Estados Unidos se encontraba ayer «clínicamente estable». Nina Pham, de 26 años, se contagió en un hospital de Texas cuando atendía a Thomas Duncan, el paciente liberiano que falleció el miércoles. «Debemos considerar la posibilidad de que haya otros casos de ébola entre los trabajadores que atendieron a Duncan», afirmó Thomas Frieden, director del Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), reconoció que todavía no se sabe cómo se contagió la joven y sostuvo que Estados Unidos debe «repensar el modo en que se aborda el control del ébola».

Por lo demás, las autoridades sanitarias de Dallas anunciaron que no se proponen sacrificar al perro de Nina Pham. En España, el sacrificio del perro Excalibur, de la enfermera Teresa Romero, había dado lugar incluso a movilizaciones de protesta. Ayer, el alcalde de Dallas, Mike Rawlings, dijo que «el perro es muy importante para la paciente y queremos que esté a salvo».

En Madrid, Teresa Romero «está generando anticuerpos contra el virus y eso es muy positivo», reveló un representante del comité español de seguimiento del ébola. La enfermera, de 44 años, recibe dos tratamientos experimentales: uno consiste en la administración de anticuerpos producidos a partir del plasma de una persona que padeció el ébola, y el otro es un fármaco antiviral: en la mejoría de la paciente «influye muchísimo que es joven, y hay que ser prudente porque los pacientes con ébola tienen una falta de función de los pulmones que puede traer una complicación grave en cualquier momento», aclaró el miembro del comité de seguimiento.

14 octubre 2014

1 comentario:

Piedra dijo...

Lo que realmente muestra es el poder de manipulación de los medios, la capacidad del sistema para aterrorizar a la población y la desvergüenza de usar esto para imponer restricciones a la libertad.

Con la absurda excusa de la salud se da el visto bueno a controlar aun más el tráfico de mano de obra esclava del tercer mundo y a nuestra propia población.

<también se muestra como en occidente las enfermedades se curan, aunque sean inventadas, y como en África de lo que se muere es de hambre y miseria.

Salud!