lunes, 30 de mayo de 2011

Españistán, de la Burbuja Inmobiliaria a la Crisis

por Aleix Saló

[Aleix Saló es un joven ilustrador catalán que explica la crisis económica en la que estamos inmersos mucho mejor que la mayoría de los economistas que salen en los media confundiéndonos con su retórica opaca. Si os gusta el video, difundidlo, please.]




7 comentarios:

KRATES dijo...

BIENVENIDOS A ESPAÑISTÁN

Por José A. Pérez

Bienvenidos al país con el mejor sistema educativo de toda África. El país de las hipotecas crecientes y los sueldos menguantes, una democracia joven que lo mismo te patenta la fregona que te planta un adosado sobre una fosa común por aquello de cerrar viejas heridas.

Bienvenidos al país con los directivos mejor pagados de Europa y la tasa de paro más alta del mundo libre. El país donde el 65% del dinero circula en billetes de 500, la nación de naciones con más idiomas, bailes regionales y cocaína por habitante del planeta. La capital mundial del currículum vitae, el neón en los bajos y el inglés nivel medio, orgullosos inventores de la hipoteca a cincuenta años y el minipiso cuco pero asfixiante.

Bienvenidos a este fantástico país donde los ingenieros son parias y las chonis líderes de opinión, ¿me entiendes? Donde la innovación es un anglicismo y la prensa un conglomerado de propagandas con sudoku adjunto. El país donde los políticos inauguran descampados no vaya ser que alguien, algún día, monte ahí un hospital.

Digan hola a nuestros jueces progresistas y a nuestros jueces conservadores. Somos tan demócratas que lo tenemos todo bipolar. Aquí los poderes del Estado están separados por paneles corredizos de Pladur para agilizar el tránsito de maletines.

¡Contemplen el milagro económico erigido con poderosas vigas de arena de playa! Si no te gusta cómo están las cosas, manda un SMS con el texto LA GRAN FIESTA DE LA DEMOCRACIA y entrarás en el sorteo de un contrato como mano de obra barata más allá de Pirineos.

Tomen asiento y disfruten del país donde la corrupción es avalada democráticamente, el balcón desde el que Europa salta a la piscina con resultado de traumatismo craneoencefálico y repatriación de cadáver.

Griten conmigo: ¡bajo los adoquines están las máquinas perforadoras compradas al primo del alcalde!

Bienvenidos a Españistán.

http://www.mimesacojea.com/2011/04/espanistan-este-pais-se-va-la-mierda.html

Sorrow dijo...

Impresionante el texto... Este debería ser el texto de referencia del 15 M y no el panfleto descafeinado del tal Hessel, que ha sido impuesto por los media izquierdosillos.

leonardodelpozo dijo...

"La rebelion consiste en mirar una rosa hasta pulverizarse los ojos"
ALEJANDRA PIZARNIK

¿Cuantos estan dispuestos a tal cosa?

KRATES dijo...

Ante tal estupidez yo no estaría dispuesto.

leonardodelpozo dijo...

¡Joder! no entiendes nada Krates, tu percepcion del mundo es la de un pedo seco.
¿A que estas dispuesto tu? ¿a pulverizarte los ojos en una pantalla de cristal?
Hay que salir a la intemperie y atreverse a dejar que el sol crudo y el viento helado nos curta la piel por dentro y por fuera, y dejar que duela al arrancar de cuajo las mentiras que nos han castrado desde niños.
Y dejar ya ¡de una puta vez! tanto ropaje, tanto escritorio, tantas ideas, tantos inventos, tanta tanta mierda que nos ha convertido en unos seres risibles, palidos, gordos, pateticos.
Y mirar rosas con espinas, y no estupidos libros de economia.

KRATES dijo...

Estoy dispuesto a no quedarme ciego, a no pulverizarme los ojos con cualquier cosa, desde una flor hasta una pantalla de cristal líquido, con nada. A eso estoy dispuesto. ¿Morir contaminado por residuos humanos o por una catástrofe natural, lo artificial como lo natural pueden ser también peligrosos?

Más miedo que el «calentamiento global» me lo produce un posible desastre nuclear.

leonardodelpozo dijo...

Tambien tienes tu razon en lo que dices, creo que mas bien es que utilizamos el Lenguaje de diferente manera. ¡¡¡Ufff, que lio!!!
Te mando un ramo de rosas blancas(de amistad ¡eeeh! no confundas) arrancadas de un vigilado jardin publico, ¡y pelillos a la mar!