martes, 17 de abril de 2012

¿A qué se debe el gran aumento en los precios del petróleo? ¿“Pico del petróleo” o especulación en Wall Street?

F. William Engdahl, Global Research, 16/03/2012
Traducido del inglés para Rebelión por Germán Leyens



Desde más o menos octubre del año pasado, el precio del petróleo crudo ha aumentado violentamente en los mercados de futuros del mundo. Diferentes personas tienen explicaciones diferentes. La más común es la creencia en los mercados financieros en que una guerra entre Israel e Irán o EE.UU. e Irán, o de los tres países, es inminente.

Otro campo argumenta que el precio aumenta inevitablemente porque el mundo ha pasado lo que llaman “el pico del petróleo” – el mundo en una imaginaria campana de Gauss (vea el gráfico anterior) en el cual la mitad de todas las reservas de petróleo conocidas del mundo han sido agotadas y el petróleo restante disminuirá en cantidad a un ritmo acelerado con el aumento del precio.

Las explicaciones relacionadas con el peligro de guerra y con el pico del petróleo están equivocadas. Como en el astronómico aumento de precios en el verano de 2008 cuando el petróleo en mercados de futuros alcanzó brevemente 147 dólares por barril, el petróleo aumenta actualmente debido a la presión especulativa en los mercados de futuros de petróleo de los fondos de alto riesgo y de grandes bancos como Citigroup, JP Morgan Chase y sobre todo, Goldman Sachs, el banco que siempre está presente cuando se puede ganar mucho dinero con poco esfuerzo apostando a algo seguro. Reciben una generosa 1 ayuda de la agencia del gobierno de EE.UU. encargada de regular los derivados financieros, la Comisión del Comercio en Futuros sobre Mercancía de los Estados Unidos (CFTC).

Desde principios de octubre de 2011, hace unos seis meses, el precio de Futuros de Petróleo Crudo Brent en la bolsa ICE Futures ha aumentado de un poco menos de 100 dólares el barril a más de 126 dólares por barril, un aumento de más de un 25%. En 2009, el petróleo costaba 30 dólares el barril.

Sin embargo la demanda de petróleo crudo en todo el mundo no aumenta, sino más bien ha disminuido en el mismo período. La Agencia Internacional de Energía (IEA) informa que el suministro de petróleo del mundo aumentó en 1,3 millones de barriles por día en los últimos tres meses de 2011 mientras la demanda mundial aumentó en un poco más de la mitad de esa cifra durante el mismo período. El uso de gasolina en EE.UU. ha bajado en EE.UU. en un 8%, en Europa en 22% e incluso en China. La recesión en gran parte de la Unión Europea, una recesión/depresión que se profundiza en EE.UU. y una ralentización en Japón han reducido la demanda global de petróleo mientras cada día se anuncian nuevos descubrimientos y países como Iraq aumentan su suministro después de años de guerra. Un breve aumento en las compras de petróleo de China en enero y febrero tuvo que ver con una decisión en diciembre pasado de crear su Reserva Estratégica de Petróleo y se espera que vuelva a niveles más normales de importación a fines de este mes.

¿A qué se debe entonces el inmenso aumento en los precios del petróleo?

Jugando con ‘petróleo de papel’

Es útil lanzar una breve mirada al funcionamiento actual de los mercados de “petróleo de papel”. Desde que Goldman Sachs compró en los años ochenta J. Aron & Co., un experto negociante en materias primas, el comercio en petróleo crudo ha pasado de un campo de compradores y vendedores de petróleo disponible para entrega inmediata o físico a un mercado en el cual la especulación no regulada en futuros de petróleo apuesta a un precio de un cierto crudo en una fecha futura específica, usualmente en 30 o 60 o 90 días, y los precios diarios de petróleo no son determinados por la verdadera oferta y demanda.

En los últimos años, el Congreso de EE.UU. amigo de (y financiado por) Wall Street ha aprobado varias leyes para ayudar a los bancos interesados en los negocios de futuros de petróleo, entre ellas una que permitió que Enron en bancarrota se saliera con la suya con un esquema Ponzi por un valor de miles de millones de dólares antes de quebrar.

La Ley de Modernización del Marco General de los Futuros sobre Commodities (CFMA) fue redactada por el hombre que actualmente es el secretario del Tesoro del presidente Obama, Tim Geithner. La CFMA dio en efecto carta blanca al comercio libre (entre instituciones financieras) de derivados en futuros energéticos, sin ninguna supervisión del gobierno de EE.UU., como resultado del cabildeo con influencia financiera de los bancos de Wall Street. El petróleo y otros productos energéticos fueron eximidos bajo lo que llegó a ser llamado “la brecha jurídica Enron”.

En 2008 durante una indignación popular contra bancos de Wall Street por causar la crisis financiera, el Congreso finalmente aprobó una ley por sobre el veto del presidente George Bush para “cerrar la brecha jurídica Enron”. Y desde enero de 2011, según la ley de Reforma Dodd-Frank Wall Street, la CFTC obtuvo autoridad para imponer límites a negociantes en petróleo desde enero de 2011.

Curiosamente, esos límites todavía no han sido implementados por la CFTC. En una reciente entrevista el senador Bernie Sanders de Vermont declaró que la CFTC “no tiene la voluntad” de imponer esos límites y “tiene que obedecer la ley”. Agregó que: “Lo que tenemos que hacer… es limitar la cantidad de petróleo que cualquier compañía puede controlar en el mercado de futuros de petróleo. La función de esos especuladores no es utilizar petróleo sino lograr beneficios mediante la especulación, hacer subir los precios y vender.” [1] Mientras ha hecho ruidos respecto al intento de cerrar las brechas jurídicas, el presidente de la CFTC, Gary Gensler, no lo ha hecho hasta ahora. Notablemente, Gensler es un ex ejecutivo de, ya lo adivinasteis, Goldman Sachs. La puesta en práctica por la CFTC todavía no existe.

Numerosas fuentes subrayan el papel de bancos clave junto con los principales petroleros como BP en la manipulación de una nueva burbuja del precio del petróleo desde otoño pasado, distante de la realidad física de los cálculos de oferta y demanda de verdaderos barriles de petróleo.

Un ‘casino de apuestas…’

Se estima actualmente que especuladores, o sea negociantes en futuros como bancos y fondos de alto riesgo que no tienen ninguna intención de llegar a recibir físicamente sino solo de lograr un beneficio en el papel, controlan actualmente cerca de un 80% del mercado de futuros energéticos, un aumento de 30% en una década. El presidente de la CFTC, Gary Gensler, tal vez para mantener una pátina de credibilidad mientras su agencia ignora el mandato legal del Congreso, declaró el año pasado refiriéndose a los mercados del petróleo que “inmensos flujos de dinero especulativo crean una profecía que se auto realiza y aumenta los precios de materias primas”.[2] A principios de marzo, el ministro del Petróleo kuwaití Hani Hussein dijo en una entrevista transmitida por la televisión estatal: “Según la teoría de la oferta y la demanda, los precios actuales del petróleo no se justifican”.[3]

Michael Greenberger, profesor de la Escuela de Derecho de la Universidad de Maryland y ex regulador de la CFTC, quien ha tratado de atraer la atención pública a las consecuencias de las decisiones del gobierno de permitir la especulación y manipulación ilimitada de precios energéticos por grandes bancos y fondos, señaló reciente: “Existen 50 estudios que muestran que la especulación agrega un suplemento increíble al precio del petróleo, pero por algún motivo esto no ha llegado a la sabiduría convencional”. Greenberger dijo: “Una vez que el mercado es dominado por especuladores, lo que se tiene en realidad es un casino de apuestas”.[4]

El resultado de la regulación permisiva de los mercados del petróleo por el gobierno de EE.UU. ha creado las condiciones ideales mediante las cuales un puñado de bancos e instituciones financieras estratégicas, de modo interesante las mismas que dominan el 3 comercio mundial en derivados del petróleo y las mismas que poseen las acciones de la mayor bolsa de comercio de petróleo en Londres, ICE Futures, logran manipular inmensos cambios a corto plazo en el precio que pagamos por petróleo o gasolina o innumerables otros productos basados en el petróleo.

Nos encontramos en medio de uno de esos cambios, empeorado por la retórica belicista israelí respecto al programa nuclear de Irán. Quisiera declarar categóricamente mi firme convicción de que Israel no se lanzará a una guerra directa contra Irán, ni lo hará Washington. Pero el efecto de la retórica belicista es crear el trasfondo ideal para un masivo aumento especulativo en el petróleo. Algunos analistas hablan de petróleo a 150 dólares en el verano.

Hillary Clinton acaba de asegurar que el precio del petróleo siga aumentando durante meses por temor a una guerra con Irán al presentar un nuevo ultimátum a Irán por el tema nuclear en conversaciones con el ministro de Exteriores ruso, Lavrov: “a fines de este año o…” [5]

De manera curiosa, uno de los verdaderos impulsos de la actual burbuja de los precios del petróleo son las sanciones económicas del gobierno de Obama impuestas recientemente a las transacciones de petróleo del Banco Central de Irán. Al presionar a Japón, Corea del Sur y a la UE para que no importen petróleo iraní, o enfrenten acciones punitivas, Washington ha impuesto una inmensa caída en el suministro de petróleo de Irán al mercado mundial en las últimas semanas, generando un fuerte impulso al juego con derivados del petróleo de Wall Street. En un artículo de opinión reciente en el Financial Times de Londres, Ian Bremmer y David Gordon de Eurasia Group escribieron: “… eliminar demasiado petróleo iraní del suministro de energía del mundo podría causar un aumento del precio del petróleo, que paralizaría la recuperación, incluso si causa un cierto daño financiero a Irán. Tal vez por primera vez, las sanciones tienen el potencial de ser “demasiado exitosas” afectando a los sancionadores tanto como a los sancionados.”

Irán envía entre 300.000 y 400.000 barriles menos por día que sus acostumbrados 2,5 millones de barriles, según Bloomberg. La semana pasada, la Administración de Información de la Energía de EE.UU. dijo en un informe que gran parte de ese petróleo iraní no está siendo exportado porque los aseguradores no emiten pólizas para esos embarques. [6]

El tema de especulación ilimitada y no regulada con derivados del petróleo por un puñado de grandes bancos no es algo nuevo. Un informe de junio de 2006 del Subcomité Permanente del Senado de EE.UU. de Investigaciones sobre “El Papel de la Especulación en el Mercado en el aumento de los precios de petróleo y gas”, señaló que: “…existe evidencia sustancial que apoya la conclusión de que la gran cantidad de especulación en el mercado actual ha aumentado significativamente los precios.”

El informe señaló que la CFTC había sido mandatada por el Congreso para que asegurara que los precios en el mercado de futuros reflejaran las leyes de la oferta y demanda en lugar de prácticas manipulativas o excesiva especulación. La Commodity Exchange Act (CEA) [ley federal que regula los futuros y las actividades de comercio de productos básicos en EE.UU.] estipula: “La especulación excesiva en cualquier producto básico bajo contratos de venta de ese producto básico para entrega futura… que cause fluctuaciones repentinas o irracionales o cambios injustificados en el precio de esos productos, constituye un lastre indebido e innecesario sobre el comercio interestatal de ese producto”. Además la CEA instruye a la CFTC para que establezca los límites comerciales “que la Comisión considera necesarios para disminuir, eliminar o impedir un lastre semejante”. [7]

¿Dónde está la CFTC ahora, cuando necesitamos esos límites? Como señaló correctamente el senador Sanders, la CFTC parece ignorar la ley en beneficio de Goldman Sachs y amigos de Wall Street que dominan el negocio de los futuros de petróleo.

En cuanto quede claro que el gobierno de Obama ha actuado para impedir cualquier guerra con Irán abriendo diversos canales diplomáticos secretos y que Netanyahu solo trata de utilizar las amenazas de guerra a fin de reforzar su posición táctica para negociar con un gobierno de Obama que desprecia, el precio del petróleo se derrumbará en días. Hasta entonces, los conocedores de los derivados clave del petróleo se morirán de risa. El efecto del aumento de los precios del petróleo sobre el frágil crecimiento económico del mundo, especialmente en países como China, también es muy negativo.


Notas:

[1] Morgan Korn, Oil Speculators Must Be Stopped and the CFTC “Needs to Obey the Law”: Sen. Bernie Sanders, Daily Ticker, March 7, 2012, en http://finance.yahoo.com/blogs/daily-ticker/oil-speculators-must-stopped-ctfc-needs-obeylaw-
[2] Ibíd.
[3] UpstreamOnline, Kuwait's oil minister believes current world oil prices are not justified, adding that the Gulf state's current production rate will not affect its level of strategic
[4] Peter S. Goodman, Behind Gas Price Increases, Obama's Failure To Crack Down On Speculators, The Huffington Post, March 15, 2012, en http://www.huffingtonpost.com/peter-s-goodman/gas-price-increase_b_1346035.html
[5] Tom Parfitt, US 'tells Russia to warn Iran of last chance' , The Telegraph, 14 March 2012,
[6] Steve Levine, Obama administration brushes off oil price impact of Iran sanctions,
Foreign Policy, March 8, 2012, en
[7] F. William Engdahl, ‘Perhaps 60% of today’s oil price is pure speculation’, Global Research, May 2, 2008, en

F. William Engdahl es un frecuente colaborador de Global Research.

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